El pasado 13 de septiembre, la niña Isabella Kalua, de 6 años, fue reportada como desaparecida por sus padres en Hawái, Estados Unidos. La semana pasada, ambos padres fueron arrestados por la policía por ser los principales sospechosos en el caso. Ahora, se conocen nuevos detalles de las tormentosas torturas a las que fue sometida la pequeña y que fueron narrados por su hermana mayor, de 12 años.
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I.M.K (como se ha identificado a la hermana en la declaración jurada donde se justifican los arrestos), Isaac y Lehua Kalua, los padres adoptivos, solían dejar a Isabella sin comer y la encerraban en una jaula para perros. También le tapaban la boca con cinta adhesiva para impedir que la niña se escabullera a buscar comida por la madrugada, de acuerdo con Univisión.
La hermana detalló que la madre compró por Internet una jaula para perros, a pesar de que no tienen mascota.
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Isaac y Lehua Kalua adoptaron a Isabela y a dos de sus hermanos y eran padres sustitutos de otro hermano.
Cuando fue entrevistada por la policía hace una semana, la hermana de Isabella dijo que sus padres adoptivos le pidieron que mantuviera en secreto que Isabella estaba en una jaula para perros con cinta adhesiva en la boca y en la nariz, y que la niña no despertó.
La hermana confirmó que Isabella está muerta porque ella estuvo en la escena al momento de los hechos.
Dijo que hace dos meses su madre la despertó en medio de la noche ya que Isabella estaba inconsciente dentro de la jaula para perros, que estaba en el baño.
De acuerdo con su testimonio, la madre metió el cuerpo de la niña en una bañera con agua fría para tratar de despertarla, pero no funcionó, y entonces despertó al padre y le pidieron a la hermana que siguiera durmiendo y que guardara el secreto de lo que había ocurrido. Los otros dos hermanos estaban durmiendo.
Al día siguiente, cuando se despertó, el cuerpo de la niña ya no estaba y no sabe qué pasó con él. Hasta el momento, el cuerpo de la menor no ha sido encontrado.
Unos días después, el padre adoptivo acudió a un hospital bajo la excusa de que supuestamente tenía síntomas de coronavirus.
Según la hermana de Isabella, la visita al centro médico era una farsa para que le dieran días libres en el trabajo para deshacerse de evidencia.
Univisión recuerda que Isaac K. Kalua III, de 52 años; y Lehua Kalua, de 43, reportaron la presunta desaparición de su hija adoptiva, Isabella Kalua, el pasado 13 de septiembre, desencadenando una gran búsqueda de la menor.
Ellos dijeron a las autoridades que la niña había desaparecido durante la noche. Sin embargo, la investigación reveló que a Isabella no se le había vuelto a ver desde el 18 de agosto, casi un mes antes, por lo que la policía comenzó a sospechar de los padres adoptivos y de que podría tratarse de un crimen.
El testimonio de la hermana apunta a que las torturas a Isabella eran prácticas regulares.
Tras su arresto, ambos padres se declararon inocentes de los cargos de asesinato en segundo grado por la presunta muerte de la niña.
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