Hombre fingió que tenía cáncer terminal durante años

David Carroll es un inglés, de 39 años, que se hizo famoso en los noticieros de su país cuando se conoció su historia. Durante casi una década simuló que tenía Leucemia, un tipo de cáncer en la sangre.

Carroll conoció a su esposa, Lucy Witchard, en 2006 en Leicester, Reino Unido. Desde la primera cita, el hombre le manifestó que padecía la enfermedad. Cinco años después, en 2011, se casaron.

Mira: Activistas comparecen ante un juez por tirar sopa de tomate a un cuadro de Van Gogh | VIDEO

Las sospechas de la mujer empezaron luego de que los síntomas de Carroll empeoraran y mejoraran de repente. El hombre les hizo creer a todos que su cáncer era terminal y que tenía los días contados.

Witchard intentó acompañarlo en numerosas ocasiones a sus chequeos médicos. Sin embargo, su esposo siempre lo evadió con la excusa de que estaba intentando protegerla de su enfermedad.

El matrimonio terminó luego de que David Carroll estafara a su suegra con un supuesto tratamiento. La madre de Lucy le entregó 2.600 dólares para que viajara a Estados Unidos a someterse a un procedimiento con doctores de ese país.

Mientras el hombre se encontraba de viaje, Witchard y su mamá advirtieron que solo realizaba actividades de turismo. Eso prendió sus alarmas y lo enfrentaron por teléfono. Carroll se molestó y utilizó a un amigo para que pretendiera ser un médico.”Incluso hizo que un colega suyo llamara haciéndose pasar por su doctor… Después de esa llamada, supe que nuestro matrimonio había acabado”, expresó Witchard en una entrevista con ‘BBC’.

La condena

Las mentiras de Carroll no se quedaron solo en el seno familiar y también llegaron a sus amigos. Compañeros de su equipo de rugby manifestaron que periódicamente le hacían donaciones y eventos para recaudar fondos.

 En el juicio, su abogado lo defendió bajo el pretexto de que el hombre sí padece una enfermedad, aunque no fuera cáncer. Según lo que dijo, Carroll tiene un trastorno de personalidad que lo llevó a actuar de la manera en la que lo hizo.

Finalmente el jurado lo condenó a 26 semanas de prisión, es decir, seis meses. También deberá pagar una multa de 2.600 dólares a su exsuegra por el dinero del viaje y realizará 180 horas de trabajo comunitario.