Más que un vacío legal, parece una ‘vendetta’. Luego de que el príncipe Harry rechazara trabajar con la familia real británica para hacer su vida junto a Meghan Markle -y todo el escándalo que generó-, habría quienes están empecinados en complicar su vida. El ejemplo que ahora se cita es la seguridad: ¿quién paga para protegerlo cuando pisa el Reino Unido?
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Recuerda el historiador especialista en monarquías Arnaldo Mera que en el 2020 la pareja perdió la protección policial pagada por los ingleses. Aun así, no debería haber mayores inconvenientes sobre el tema, sobre todo porque el mismo Harry quiere enfrentar solo el gasto. Sin embargo, el Ministerio del Interior no se lo permite.
Por eso es que Harry inició un proceso judicial para demandar al reino que, esta semana, fue aceptado por el Tribunal Superior de Londres. Lo que él pide es “la revisión judicial sobre las medidas a adoptar para garantizar su seguridad cuando visita el Reino Unido”.
Específicamente, lo que él solicita es revisar la decisión que el Comité Ejecutivo para la Protección de la Realeza y las Figuras Públicas tomó en febrero del 2020 y que le atañe. Según dicha institución, cuando él visita su país, ya no debería ser protegido como antes. La situación se complica porque el mismo Gobierno respalda la medida y sostiene que él tampoco “puede pagar la protección policial en forma privada”.
¿Cómo gestiona Harry su seguridad cuando visita otras partes mundo? AP explica que existe un “equipo de seguridad privado en Estados Unidos” que “carece de jurisdicción en el exterior y acceso a la inteligencia británica”.
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Detalles y polémicas
Entonces, ¿quién protege a Harry, Meghan y sus hijos?
Mera pone los puntos sobre las íes.
El primer punto es que ninguno de ellos cometió una imprudencia o delito, o protagonizó un escándalo, como sí lo hizo el príncipe Andrés, exduque de York - vinculado a Jeffrey Epstein y Ghislaine Maxwell y a su red de prostitución y abuso sexual-. El segundo es que la pareja todavía ostenta el título de duques de Sussex, del que solo pueden ser despojados por acción del Parlamento.
El tercero es que, finalmente, Harry todavía sigue en la línea de sucesión. Es un príncipe inglés con derecho al trono.
“Aun así, él solo ha pedido seguridad cuando pisa Inglaterra, no para otros lugares. Si lo hace es para proteger a su esposa e hijos”.
“Recordemos que él luchó en Afganistán, que él pidió ir a la guerra y que si tuvo que salir fue porque la noticia se filtró y era un gran peligro. Solo por eso y porque los talibanes finalmente ganaron, él y su familia podrían estar en la mira de cualquier terrorista”.
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AP confirma que este es el motivo de la querella: sus abogados “dijeron que el príncipe es renuente a viajar con los hijos de la pareja —Archie, de 3 años, y Lilibet, de un año— al país debido a la falta de seguridad”.
De hecho, bastaría recordar que hace unos meses, él viajó solo a develar un monumento a su madre y no pidió lo que ahora solicita.
Por eso es que Mera piensa que este asunto es una forma de venganza del círculo que rodea a la realeza, como si “les cayera mal y por eso reaccionan así”. Finalmente, dice el historiador, “los que mueven las fichas de ajedrez no son los miembros de la familia real, sino sus empleados que son más papistas que el papa”.
Por el momento, la audiencia concedida a Harry no tiene fecha.
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