Sao Paulo (Agencias)
La violencia se volvió a desatar en medio de la fiesta del Mundial. Una protesta pacífica que reunió hoy en Sao Paulo a unas 1.500 personas para exigir la gratuidad del transporte público, terminó con actos de vandalismo y enfrentamientos entre la policía y algunos manifestantes.
La protesta se inició de forma tranaquila, pero algunos manifestantes encapuchados se enfrentaron a la policía lanzando piedras y bengalas, por lo que los agentes reaccionaron con bombas de gas lacrimógeno.
Un grupo invadió un concesionario de autos de lujo y rompió los cristales y retrovisores de algunos de los vehículos que se encontraban en el interior. También fueron dañadas cuatro sucursales bancarias y el vehículo de una emisora de televisión, así como varias piezas del mobiliario público, según informó la prensa local.
La marcha fue convocada por el Movimiento Pase Libre (MPL) con el fin de conmemorar que hace exactamente un año, el grupo logró que se suspendiera el aumento del pasaje de autobús, gracias a las masivas protestas que se propagaron en el 2013 por todo el país.Según explicó una de las lideresas del movimiento, Mariana Toledo, la marcha de hoy fue convocada además para “ser un contrapunto a la Copa del Mundo, que restringió la participación popular en el evento, prohibiendo manifestaciones y (vendedores) ambulantes”.Los enfrentamientos ocurrieron en las cercanías de las estación de metro Faria Lima, en momentos en que arribaban a la terminal aficionados que habían asistido al partido entre Inglaterra y Uruguay.