Ciudadanos chilenos y miembros de la colonia peruana residente en Chile impulsaron diversos actos de paz en vísperas del veredicto de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya sobre el diferendo de fronteras marítimas que mantienen ambos países desde hace seis años.
La jornada, en la que se prevén desde ceremonias religiosas hasta el izamiento de banderas blancas en señal de concordia entre chilenos y peruanos, sale al paso de signos de hostilidad que dieron algunas autoridades de los dos lados de la frontera.
La mañana de este domingo se celebrará una misa ecuménica de católicos y evangélicos en una parroquia del popular barrio capitalino de Independencia, en el que residen gran cantidad de los más de 100.000 inmigrantes peruanos en Chile, la mayor colonia de latinoamericanos en el país.
El oficio religioso busca dar una señal de “unidad, paz, respeto y diversidad”, dijo el alcalde de la comuna ubicada al norte de Santiago, Gonzalo Durán.
En tanto, en las inmediaciones de la Plaza de Armas, en el corazón de la capital chilena, un Comité de Refugiados Peruanos en Chile realizará pasado el mediodía un acto para “reafirmar la hermandad, la integración y la unidad de los pueblos”, según informó Víctor Paiba, dirigente del movimiento Fuerza Migrante.
Por la tarde tendrá lugar una Vigilia por la Paz y la Justicia Social en Latinoamérica en la Plaza Italia, en el centro de Santiago, donde los chilenos celebran principalmente los triunfos deportivos. La iniciativa es “promover la unidad y terminar los conflictos entre los países limítrofes”, según dijo el médico Rodrigo Paz, que preside una de las organizaciones convocantes.
“Hoy día el país está invirtiendo 3,1 por ciento del PIB de toda la riqueza nacional en armas. El real peligro para la seguridad de este país no está en Perú, no está en Bolivia, no está en Argentina, está dentro de nuestro territorio en los millones de chilenos que hoy viven en la más absoluta desprotección social”, añadió Paz.
Además, los arzobispos católicos de las ciudades fornterizas de Arica, en Chile, y Tacna, separadas por poco más de 50 kilómetros, oficiarán una misa en la iflesia de San Marco en Arica.
BANDERAS BLANCASEl sacerdote jesuita José Tomás Vicuña está promoviendo la campaña “Iza tu bandera blanca” en vez de los emblemas de Chile y Perú en la zona. “Hemos sido hermanos antes y seguiremos siendo hermanos después de lo de La Haya”, dijo el religioso en declaraciones que recogen medios locales.
Los gestos de unidad y paz se oponen a los llamamientos que efectuó recientemente el ex presidente peruano Alan García de embanderar su país el día del fallo o a la iniciativa del diputado chileno Jorge Tarud de convocar a un plebiscito para que los chilenos decidan si aceptan o no el dictamen de La Haya.
Las desconfianzas y tensiones entre las dos naciones han sido casi permanentes desde la Guerra del Pacífico de 1879, en la que Chile anexó miles de kilómetros cuadrados de Bolivia y Perú, ocupando además Lima durante casi tres años, con saqueos incluidos.
El dictamen, que será conocido la mañana de este lunes luego de seis años de trabajo de la CIJ, resolverá un litigio sobre la soberanía de unos 36.000 kilómetros cuadrados en el océano Pacífico, actualmente bajo el dominio de Chile en virtud de acuerdos suscritos por ambos países en 1952 y 1954.
El Perú reclama, por su parte, que estos pactos son meros instrumentos pesqueros que no constituyen tratados de límites. Sin embargo, fueron también firmados por Ecuador y en la práctica tuvieron vigencia demarcatoria hasta que Quito y Lima firmaron en 2011 un acuerdo en que reconocieron explícitamente tales límites.