Dos años después de constituida para recuperar el control sobre los mercados de crudo, la alianza entre Rusia y la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) sigue siendo eficaz y conveniente para ambas partes.
Pero sin embargo los expertos señalan que una asociación más formal y permanente es prematura, ya que Moscú aspira a mantener su independencia.
Golpeados por la caída de los precios entre 2014 y 2016, Rusia y Arabia Saudita inicialmente se culparon mutuamente por el colapso que arrasaba sus economías.
Pero a fines de 2016 Rusia y la OPEP se unieron, y finalmente alcanzaron un acuerdo para limitar la producción de petróleo que representa más de la mitad de la oferta global.
Esta alianza (conocida como OPEP+) ha durado hasta ahora, con reuniones regulares y entendimientos para mantener límites en la producción.
El lunes, representantes de las dos partes se reunirán en un hotel en Bakú, Azerbaiyán, para revisar el acuerdo que es válido hasta Junio, y posiblemente proponer una extensión durante otro evento previsto para abril en Viena, Austria.
También tienen previsto discutir opciones para formalizar una alianza que ha aportado aire fresco a la OPEP y al mismo tiempo otorgó a Rusia un nuevo papel en el mercado petrolero.
El pacto entre la OPEP y una docena de países no integrantes, incluyendo a Rusia, no fue una decisión fácil, después de años de competición por un segmento del mercado, lo que condujo a un exceso de producción.
“Antes de la OPEP+ entre en acción, la OPEP prácticamente había cesado de funcionar”, dijo Rustam Tankayev, un experto de la Unión de Productores de Petróleo y Gas, de Rusia.
“La única posibilidad de la OPEP para recuperar el poder de regular el mercado global de petróleo era expandir significativamente la alianza”, añadió.
Por su parte, Francis Perrin, director de investigaciones del Instituto de Asuntos Internacionales y Estratégicos, de Francia, destacó que las relaciones entre Rusia y la OPEP “no siempre fueron fáciles”.
“La OPEP solía considerar a Rusia como un añadido ilícito que se beneficiaba de los esfuerzos de otros. El hecho de que han logrado esta cooperación de forma duradera ya es un resultado real”, dijo.
El desafío para la OPEP+ es retener influencia para mantener los precios en un nivel que garantice retornos presupuestarios cómodos para los países productores sin hacer estallar un 'boom' en Estados Unidos.
“El papel de la OPEP va a disminuir en los próximos 20 o 30 años, y los sauditas son conscientes de eso”, dijo Igor Delanoe, subdirector de grupo franco-ruso Observatory.
“Al enfrentar a un peso pesado como Estados Unidos, Rusia y Arabia Saudita tienen interés en alcanzar un acuerdo para mantener los precios del crudo en un nivel de entre 60 y 70 dólares por barril, que torna inútiles algunos proyectos en Estados Unidos”, señaló.
Pero si la OPEP, y especialmente Arabia Saudita, ya dejaron en evidencia que les gustaría formalizar una cooperación de largo plazo con Rusia, los rusos en cambio prefieren mantenerse firmes.
Los líderes rusos saben cuánto le deben a esta alianza luego de la caída en los precios internacionales por barril y las sanciones que pasó a sufrir luego de la anexión de Crimea.
En ese sentido, la privilegiada posición de Rusia con la OPEP le permite contraponerse a Estados Unidos en el sector energético, al tiempo que puede enfrentar a todos los intermediarios entre sí.
“Hay un único país en esa alianza que amigo de todos los otros, y ese país es Rusia”, dijo Tankayev, quien señaló las permanentes tensiones entre Arabia Saudita con Irán y Venezuela.
En diciembre, la OPEP estuvo a punto de cerrar una reunión sin alcanzar ningún acuerdo debido a las tensiones entre sauditas e iraníes.
Los observadores atribuyeron al ministro ruso de energía, Alexander Novak, quien intervino a tiempo y logró reimponer la calma a último minuto.
Sin embargo, analistas insisten en que Rusia no parece tener intenciones de convertirse en un miembro pleno de la OPEP.
“Rusia siempre ha mantenido distancia de la OPEP, marcando una distinción entre cooperación e integración”, dijo Perrin.Agencia AFP