El Ministerio de Cultura declaró como Patrimonio Cultural de la Nación a la Picantería Arequipeña, por ser un espacio de interacción entre ciudadanos de diversas clases sociales, y donde destaca la preparación de comidas y bebidas típicas de esta región.
Crónica characata: las últimas picanterías de Arequipa
La Resolución Viceministerial Nº 033-2014-VMPCIC-MC destaca que la Picantería Arequipeña posee rasgos heredados de la época prehispánica y cuya consolidación se dio durante la época de la Colonia y en la República.
Posee una larga tradición cuyo origen se remonta a los locales de expendio de bebidas, principalmente de chicha de maíz, existentes desde inicios de la Colonia y que a su vez heredaron su carácter integrador de los llamados qatus, espacios prehispánicos de intercambio y consumo de alimentos.
La existencia de las picanterías en Arequipa ha sido documentada desde el siglo XVI. En diversas crónicas históricas se les menciona como pequeños comercios de expendio de chicha y otros licores llamados simplemente 'rancherías' o 'tabernas' y que se concentraban principalmente en las zonas periféricas de la ciudad y en espacios rurales.