El Gobierno culpó esta tarde a los azuzadores por los niveles de violencia presentados en La Convención, localidad cusqueña que se encuentra paralizada durante más de 10 días por una serie de reclamos referidos a diversos aspectos.
“Situaciones como esta giran también en torno a una atmósfera que es la relacionada con las elecciones. La cuestión tiene también un foco específico, pero no se puede también caer en la tentación de recibir aquellos aspectos de desinformación que algunos, azuzando a la comunidad, pretenden generalizar. Esto es muy importante”, manifestó Daniel Figallo, ministro de Justicia.
“Estas personas que están buscando la desestabilización de un sistema electoral no deben tener espacio. Por eso es que nuestras procuradurías van a ser muy firmes para poder hacer las denuncias correspondientes a propósito de los eventos que vienen desarrollándose”, agregó.
Una de las demandas de la población que reclama en La Convención giran en torno a la poca eficiencia en el gasto público por parte de las autoridades locales. Asimismo, se cuestiona posibles actos de corrupción en la administración de los recursos.
“Se habría gastado se habría gastado en construcción de piscinas cuando no hay ni agua ni desague. Construcciones que generan indignación, por ejemplo de un Palacio Municipal por cerca de S/.6 millones. Mejoramientos de estadios, cuando hay niños que van a escuelas con infraestructura calamitosa. Esto no se puede permitir. Es imperativo que la Contraloría General de la República genere las acciones inmediatas para poder realizar los controles que tiene que realizar en los ámbitos de los gobiernos locales y sobre todo en estos donde hay dinero del canon”, agregó Figallo Rivadeneyra.
POLICÍAS USAN ARMAS NO LETALESEn la misma conferencia de prensa, el ministro Daniel Urresti Elera fue tajante en señalar que las fuerzas policiales utilizan armas no letales en el control de disturbios ocurridos en La Convención.
“Siempre en los equipos hay un pequeño grupo que tiene fusiles que están bajo el comando directo del jefe de la operación y bajo el comando directo del jefe de la operación, que bajo ninguna otra circunstancia se pueden disparar. Se está utilizando armas no letales”, aclaró.
Según dijo, hay un aproximado de 1500 efectivos policiales en la zona del referido conflicto social. Este número podría verse incrementado en las próximas horas. “Hay un mayor contingente en Mazamari y también acá en Lima con aviones que están listos para salir en caso sea necesario. Estamos monitoreando la situación hora a hora”, añadió.
Finalmente, coincidió con su colega Daniel Figallo en torno a la presencia de azuzadores que vendrían agitando la situación social. “Acá, hay azuzadores. Hay gente que tiene interés, que está detrás de cargos locales o regionales y que son los que están azuzando a la población. Espero que ellos mediten o recapaciten porque lo único que logran son mayores conflictos”.