Al culminar el año llegan buenas noticias de La Oroya, donde los 45 niños de la Cuna Jardín Casaracra han reducido sus niveles de plomo en la sangre, gracias a una buena atención alimentaria y de salud.
La Cuna Jardín Casaracra es un programa de alejamiento temporal de los niños que presentan los mayores niveles de plomo sangres, impulsado por el Ministerio de Salud (Minsa). El programa se inició hace 10 años con apoyo de la empresa Doe Run Perú. Desde enero del 2013 es administrado por la ONG Vida, que continúa siendo asesorada por la Estrategia de Metales Pesados del Minsa.
Arturo Alfaro, presidente de La ONG Vida, explicó que el buen resultado obtenido este año se debe al cumplimiento estricto de los protocolos de atención médica y alimentación. En los últimos 12 meses, Cuna Jardín Casaracra atendió a 45 niños. El más grave de ellos tenía más de 30 ug/dl de plomo en la sangre cuando empezó su tratamiento. En noviembre pasado, sus niveles habían bajado a 15 ug/dl de plomo.
Rosa Amaro, presidenta de la Asociación La Oroya por Un Cambio, destacó estos buenos indicadores, pero lamentó que el programa llegue a un número tan limitado de niños. “Lamento también que al final del año no se haya atendido a las madres gestantes de La Oroya, que es una obligación de la empresa Doe Run Perú, y que el Estado no haya realizado más dosajes de plomo a los niños para conocer si hay más afectados por el plomo“, dijo.
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