La ministra de Agricultura y Riego, Fabiola Muñoz, anunció que mañana se reunirá con representantes de la Convención del Agro Peruano (Conveagro), de la Junta Nacional de Usuarios del Riego y de otras diez organizaciones que convocaron un paro nacional agrario para el lunes 13 de mayo.
Estos gremios –que representan a unos tres millones de agricultores– exigen al Estado modificar la política de reducción arancelaria a la importación de alimentos, impulsar la agricultura familiar, crear medidas que impulsen la producción agropecuaria del país, así como cambiar la regulación en las juntas de usuarios de agua.
Muñoz señaló, en conversación con El Comercio, que la voluntad del Ejecutivo en este tema pasará por una política de diálogo y la definición de una agenda de trabajo conjunta.“A nadie le conviene el paro. Tenemos más cosas en común que diferencias en temas como el impulso a la agricultura familiar. Están convocando un paro sin la oportunidad de haberme escuchado”, sostuvo.
La última paralización de este tipo ocurrió en febrero del 2018, cuando productores de papa de Junín, Ayacucho, Huancavelica, Huánuco, Apurímac y Pasco bloquearon carreteras para exigir declarar en emergencia el sector agrario. Las protestas dejaron al menos dos muertos.
—Tema de fondo—La ministra resaltó además la importancia de adoptar una solución basada en componentes de largo plazo como el reordenamiento de la superficie agrícola, tomando en cuenta la vocación productiva de cada lugar.
“En Tumbes deberíamos sumar esfuerzos para que sea una región frutícola. Ahora el cultivo más importante es el arroz. La rentabilidad por hectárea de arroz es de S/1.000, mientras que la de productos como el banano orgánico es diez veces más. En la sierra, la pequeña agricultura familiar tiene una vocación maravillosa para producir cereales andinos”, explicó.
Frente a esto, Muñoz señaló que el ministerio debe adoptar opciones creativas que ayuden a los agricultores a realizar el cambio en los cultivos.