La mejor forma de enseñar algo es con el ejemplo. Ese es un dicho que podría calzar con la historia de Luis Gonzaga Pomares Hernández, o don Luis, como lo conocen a sus 68 años. Desde que nació en Piura, en 1951, tuvo en casa a un héroe de carne y hueso, su padre, quien era bombero y siempre quiso imitar.
Ese sueño logró cumplirlo a los 23 años, luego de terminar su servicio militar obligatorio en la Fuerza Aérea del Perú (FAP) y unos cursos en dicha institución en 1974. Así, don Luis se inició en su verdadera vocación, la de velar por la seguridad y bienestar de las personas.
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Se incorporó a la Compañía de Bomberos de Piura, ‘Piura 25’, de la que llegó a ser teniente brigadier y en la que forjó buenas amistades. “Es un gran grupo humano, son alegres y siempre nos bromeamos; juego mucho con ellos, y siempre me hacen reír”, cuenta el hombre de rojo.
También le ha tocado vivir situaciones arriesgadas, como los incendios en el Mercado Modelo, en el Centro Comercial Alfredo Chunga y en el depósito de arroz Casa. Sin embargo, nada le hará olvidar aquella vez que tuvo que empujar el viejo vehículo que los transportaba al lugar del siniestro o el cumplir su misión vistiendo de civil porque él y sus compañeros no tenían los uniformes de bomberos.
A pesar de no haber tenido días fáciles, gracias al apoyo de su esposa y tres hijos don Luis no ha desistido -durante más de cuatro décadas- de seguir perteneciendo a la Compañía de Bomberos. En la actualidad dicha actividad es su razón de ser.
“La vida no es fácil, pero siempre hay alguien que necesita más que uno; una comidita, unos zapatitos; eso lo vemos nosotros al llegar a un incendio y la gente está desesperada porque lo ha perdido todo, aunque no la vida. Ah, los bomberos no solo apagamos incendios, también salvamos vidas”, reflexiona el señor Pomares.
Luis agradece formar parte desde agosto de 2017 del Programa Pensión 65 del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), porque con la subvención económica que le otorga el Estado; además de poder continuar sirviendo a la comunidad como bombero, compra sus alimentos y así ayuda al sustento de su hogar.
Este 5 de diciembre se celebra el Día del Bombero Voluntario del Perú, fecha que conmemora la fundación en el año 1860, de la que actualmente es la compañía más antigua del país: la Unión Chalaca Nº 1, ubicada en el puerto del Callao.
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