La cantante y fundadora de Corazón Serrano, Edita Guerrero Neira, no falleció a causa de un aneurisma cerebral. Así lo confirmaron los resultados de la necropsia practicada por peritos especializados a pedido de la fiscal Victoria Allemant.
Según informó Ralph Zapata, corresponsal de El Comercio en Piura, los abogados de la familia de la desaparecida artista señalaron que los exámenes realizados arrojaron que se encontró rastros de al menos “28 golpes en la cabeza y en el cuerpo de Edita”.
Los letrados se reservaron el derecho de plantear una demanda contra Paul Olórtiga, viudo de Edita, pero sí expresaron su deseo en torno a que el Ministerio Público (MP) solicite prisión preventiva contra Paul Olórtiga, viudo de la intérprete de “Alitas quebradas”.
“Así es, nos acaban de informar que no murió por una aneurisma. Vamos a consultar con la familia”, manifestó el letrado Medardo Arce.
Asimismo, se supo que los médicos que atendieron a Guerrero Neira en sus últimas horas de vida, serán investigados por presuntamente haber cometido una negligencia al no evitar el lamentable deceso.
Edward Sánchez, abogado del viudo de la cantante, no declaró a los medios y abandonó rápidamente la sede del MP, ubicada a espaldas de la plaza de armas de Piura.