El expresidente Alejandro Toledo, de 73 años, fue detenido alrededor de las 6:30 de la mañana de ayer por las autoridades de Estados Unidos como parte del proceso de extradición que se le sigue por la investigación del presunto pago de coimas por US$20 millones que le habría entregado la empresa brasileña Odebrecht.
Toledo se paseaba libremente por las calles de Estados Unidos desde enero del 2017, mes en el que salió del país.
Incluso, un mes después, cuando se ordenó su captura para que cumpliera una orden de prisión preventiva de 18 meses por los presuntos pagos de Odebrecht, Toledo Manrique seguía participando en la vida académica en la Universidad de Stanford y disfrutando de los restaurantes del país del ‘sueño americano’.
Esto cambió la mañana de ayer, cuando agentes del Servicio de Alguaciles Federales lo arrestaron para dar cumplimiento a una orden emitida por el juez Thomas S. Hixson de la Corte del Distrito Norte de California.
El magistrado emitió la orden al iniciar el trámite del pedido de arresto con fines de extradición que el Estado Peruano presentó contra Alejandro Toledo Manrique en febrero del 2017, tras emitirse una orden de prisión preventiva para que sea procesado por los delitos de tráfico de influencias, lavado de activos y colusión.
En marzo del 2018 se terminó de formalizar el trámite de extradición ante las autoridades norteamericanas.
Fue el Ministerio Público, a través de la Oficina de Cooperación Internacional, a cargo de la fiscal superior Celia Goicochea, el que confirmó la detención del exmandatario en Estados Unidos.
“Es su primera comparecencia ante las autoridades norteamericanas”, informaron en dicha oficina.
Cabe precisar que la orden de detención es solo contra Alejandro Toledo Manrique.
Existe otro pedido de extradición contra el exjefe del Estado, su esposa Eliane Karp y otros por el Caso Ecoteva. Pero este aún no es analizado por el Poder Judicial.
—Audiencia el viernes —El pedido de detención por el Caso Odebrecht, según informó el embajador del Perú en Estados Unidos, Hugo de Zela, lo realizó un fiscal federal estadounidense. Esto, luego de que el Departamento de Estado de EE.UU. y el Departamento de Justicia declararan procedente el caso para su evaluación.
“Una vez que ambos ministerios terminaron ese estudio se lo pasaron al fiscal de California, que es donde reside el expresidente Alejandro Toledo. Entonces, ese fiscal presentó el requerimiento hace unos días ante la corte del distrito correspondiente, que es el Distrito Norte de California”, dijo De Zela en comunicación con El Comercio.
Toledo ha quedado detenido en un recinto de California, informó el embajador.
Desde el Departamento de Justicia, a través de su vocera Nicole Navas, se informó que Toledo permanecerá bajo custodia hasta la realización de una audiencia. Esta la llevará a cabo el juez Thomas S. Hixson, este viernes 19 , a las 10:30 a.m. (12:30 p.m. de Lima), para decidir si confirma la detención de Toledo o le otorga una fianza para que afronte el proceso de extradición en libertad.
La audiencia se llevará a cabo en la Sala A, en el piso 15 del Phillip Burton Federal Building, en el 450 Golden Gate Ave., San Francisco. La especialista de la causa en el tribunal será Rose Mahe.
De Zela explicó que el juez puede emitir su decisión el mismo viernes o tomarse unos días más para resolver.
Indicó que, hasta el momento, Toledo no ha solicitado asesoría consular.
El Comercio trató de ubicar a Roberto Su, abogado de Toledo, pero este no respondió las llamadas en todo el día.
—Vizcarra se pronuncia —La decisión adoptada por la justicia de Estados Unidos fue saludada por el presidente Martín Vizcarra, quien aseguró: “Tenemos que ser conscientes de que la justicia puede tardar, pero llega”. Consideró que Alejandro Toledo debe “dar cara a la justicia”.
“Cada quien tiene que hacerse responsable de sus actos y tienen que tener la valentía de enfrentar a la justicia aquí en el país, donde debe ser”, señaló.
“Estados Unidos está iniciando un proceso de extradición que esperemos que se cumpla en el menor plazo posible”, sostuvo el mandatario.
El ministro de Justicia, Vicente Zeballos, se mostró confiado en que la justicia estadounidense no aceptará el requerimiento de fianza del expresidente porque “en el 90% de casos este ha sido negado”. Sin embargo, adelantó que el trámite propio de la extradición podría demorar un año.
“Agotada esta vía del proceso regular puede inclusive la defensa de Toledo plantear un recurso de hábeas corpus que aproximadamente dura seis meses”, advirtió.
Vizcarra dio como ejemplo el proceso de extradición del expresidente de Panamá Ricardo Martinelli ante la justicia de Estados Unidos.
“El caso del presidente panameño, Ricardo Martinelli, tomó dos años y un mes”, dijo. En esa línea, confirmó que el mismo estudio que asesoró al Gobierno de Panamá fue contratado por el Perú.
El jefe del equipo especial Lava Jato, Rafael Vela, indicó que la decisión de la justicia norteamericana se tomó porque “considera que no solo hay una causa probable de investigación sólida, sino que además está desvinculada de cualquier tipo de persecución política”.
Por su parte, el procurador del Caso Lava Jato Jorge Ramírez informó que está evaluando viajar a la audiencia de este viernes en California.