El presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo Vela, negó ante el Congreso haber recibido presiones de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) o de otros jueces supremos para emitir un pronunciamiento relacionado al caso de la fiscal suprema Zoraida Ávalos. Esta es una de las supuestas “causas graves” con las que la moción de la legisladora Patricia Chirinos promueve la destitución del pleno de la junta.
Javier Arévalo se presentó este viernes ante la Comisión de Justicia del Congreso, encargada de la investigación sumaria al pleno JNJ. Se le citó para responder por ese aspecto de la moción de Patricia Chirinos, que se basó en una versión periodística sobre supuestas presiones de parte de tres magistrados de la JNJ al propio titular de la Corte Suprema y a otros jueces supremos.
En su declaración, Javier Arévalo se refirió a lo ocurrido como la “historia de una noticia mal contada” y afirmó que “ni el Congreso, ni la JNJ, ni la fiscalía pueden andar abriendo investigaciones por chismes”. “Estoy acá para contestar qué pasó: a mí nadie me presiona [...] A mí me nadie me ha presionado, les preciso”.
“Ya era hora de que hablara y estoy hablando”, afirmó el titular del Poder Judicial, quien refirió que no tocó este tema antes porque hay una investigación fiscal sobre el tema y porque él mismo tiene indagaciones en la JNJ. También rechazó que haya recibido presiones por parte de otros jueces supremos. “Ellos no me han presionado y no se los permitiría [...] Yo no me he sentido presionado. A mí nadie me presiona, porque el que me presiona, sabe cómo voy a responder”.
Finalmente, aseguró que los integrantes de la JNJ que según la moción de Chirinos habrían estado detrás de las supuestas presiones, “nunca han hablado conmigo de este tema”. “Quiero que quede bien claro”, enfatizó.