Para el primer ministro Héctor Valer parecen no valer lo suficiente las denuncias en su contra por violencia familiar, mucho menos la forma de intentar defenderse de dichos cuestionamientos.
El jueves, en una conferencia de prensa, pretendió desvirtuar tales acusaciones recurriendo a desordenados y confusos argumentos alejados de cualquier aclaración. Ante un resultado que dejó más dudas que respuestas, optó por recurrir a un agresivo tono político de chantaje y amenaza, aferrándose a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) pese a los cuestionamientos.
MIRA: Héctor Valer: las cuestionadas e insultantes publicaciones del primer ministro en Facebook
Tras señalar que su Gabinete acatará una eventual negativa del Parlamento al pedido del voto de confianza, advirtió la posibilidad de que el gobierno disuelva dicho poder del Estado. “Nos iremos, se reestructurará el Gabinete y habrán perdido, desde luego lo que buscan los otros congresistas, la primera bala de plata del Congreso para luego el presidente de la República utilizar la bala de oro, que es la disolución del Congreso de la República. Porque puede interponer una nueva moción [cuestión] de confianza”, sostuvo.
Acotó que la consecuencia sería “una situación muy grave para el país”, pero luego aseguró que no quiere llegar a ese escenario.
Expuso a su hija
En su defensa, Valer buscó desacreditar la resolución judicial del 2017 que consigna las denuncias por violencia física presentadas contra él por parte de su esposa Ana Montoya [fallecida] y su hija Catherine Valer. En el documento se dictaron medidas de protección a favor de su difunta cónyuge.
Asimismo, un parte policial de octubre del 2016 consigna la denuncia presentada por Catherine Valer en la Comisaría de San Borja. Ella declaró que su padre “le propinó bofetadas, puñetes, patadas en el rostro y diferentes partes del cuerpo y jalones de los cabellos”.
Respecto de la resolución, dijo que es “nula” y “falsa”, y que “la denuncia no existe”. Para ello, aseveró que “la prueba planteada no pertenece a la demandante, el certificado médico legista podría ser falsificado, no hay firma alguna de mi esposa. La declaración no está en el expediente, no hay declaración de mi hija, no hay declaración mía. O sea, no hay debido proceso”.
“No soy un maltratador, no soy uno que pega. No soy lo que dice la denuncia en la comisaría, que dicho sea de paso también vamos a investigar”, añadió.
Durante su alocución, Valer expuso públicamente fotos y mensajes de su hija en Facebook con expresiones afectivas hacia él. “Ustedes pueden revisar su Facebook, con su madre inclusive estamos juntos. Tiene muchas palabras a favor de su padre”, arguyó.
Según agregó, no maltrató a su hija en su vivienda, sino que solo le realizó “llamados de atención”.
Tanto las expresiones de Valer sobre el Congreso, como sus explicaciones ante las denuncias de violencia familiar, recibieron el rechazo de miembros de distintas bancadas.
Insultos en Facebook
Sobre Valer aparecen también otros cuestionamientos. El primer ministro y congresista de Perú Democrático cuenta con publicaciones en Facebook [ver algunas en la parte superior] que revelan algo más que posturas políticas, según pudo revisar El Comercio. Incluso, imágenes que combinan a mujeres de pocas prendas con símbolos partidarios.
Esas publicaciones y las graves acusaciones contra Valer distan del mensaje que, el 8 de marzo del 2021, entonces como candidato al Congreso por Renovación Popular, publicó en defensa de las mujeres por el Día Internacional de la Mujer.
El 8 de abril del 2016, publicó un fotomontaje totalmente alejado de esa defensa: una mujer desnuda, cubierta en sus zonas íntimas por símbolos del Frente Amplio y con el rostro de la excandidata presidencial de dicho partido en el proceso electoral de aquel año, Verónika Mendoza.
Una publicación similar realizó el 7 de setiembre del 2014. Se trata de dos mujeres que visten shorts y tops, y que sobre estos aparece el símbolo del otrora partido Unión por el Perú (UPP). Por entonces, Valer postulaba a la presidencia regional de Lima por dicha agrupación.
En su página en Facebook también aparecen mensajes contra lo que llama “ideología de género”. El 20 de julio del 2019 cuestionó que el Ejército se haya sumado a la campaña del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) denominada “Hombres por la igualdad de género, fuerza sin violencia”, que precisamente buscaba luchar contra la violencia hacia la mujer.
El 20 de setiembre del 2015, Valer compartió una imagen con contenido xenófobo. Según él, se trató de una “reflexión” del Frente Amplio de Desarrollo, movimiento político que por entonces impulsaba en la región Lima.
El 27 de julio del 2019, difundió una imagen editada de Pedro Olaechea, entonces presidente del Congreso, sobre la figura de un militar nazi.
Luego, otras publicaciones dan cuenta de sus posturas políticas en distintos momentos y de su firme simpatía por el Apra.
Pronunciamientos
Los pronunciamientos y cuestionamientos a raíz de las denuncias contra Valer no han venido solo de la oposición. El jueves también intervino el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), enbezado por la también criticada ministra Katy Ugarte.
Mediante un comunicado, el MIMP instó a que las denuncias contra Valer “se esclarezcan y se realicen todas las investigaciones que correspondan”. Asimismo, señaló estar “a disposición de las presuntas víctimas para brindarles atención integral”.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo sostuvo que los ministros que mantienen acusaciones de violencia familiar contra mujeres, niñas, niños y adolescentes, o niegan la diversidad sexual “no pueden continuar en el cargo”.
Se vocea su salida
Además de los cuestionamientos, Valer enfrenta la posibilidad no obtener el voto de confianza para su Gabinete, según han adelantado algunas bancadas.
Pero también tiene en frente la posibilidad de ser removido. Según pudo conocer El Comercio, el “círculo” del presidente Pedro Castillo ha vuelto a poner sobre la mesa el nombre de Roberto Sánchez Palomino, titular del Mincetur, como primer ministro, cargo para el que fue voceado antes del nombramiento de Valer.
Hasta la noche del jueves, empero, en la PCM no habían coordinaciones para algún cambio.
El presidente Castillo cumplió el jueves actividades en Brasil. A lo largo de la jornada, como en otras ocasiones, guardó silencio sobre esta nueva crisis de su gobierno.
Por la noche, en declaraciones a TV Perú, Héctor Valer dijo no haber conversado con el presidente luego de que este arribara a Palacio proveniente de Brasil. “No me ha manifestado absolutamente nada respecto al incidente, pero sí me ha dicho que debo esclarecer los hechos. Se ha esclarecido. No me ha tocado otro tema. Por tanto, tengo el respaldo del presidente”, señaló.
PUNTOS DE VISTA
“Estamos hablando de situaciones graves en la vida de las mujeres”
Diana Miloslavich Túpac, coordinandora del Programa de Participación Politica del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristan
Las personas que denuncian violencia familiar se encuentran muchas veces en su camino con obstáculos de los propios operadores de justicia.
Él no puede ampararse en la debilidad de los servicios públicos que tiene el Estado para decir que no ha cometido los ilícitos. Recomiendo al primer ministro que asuma, pida disculpas y se atenga a las investigaciones.
Estamos hablando de situaciones graves en la vida de las mujeres, de esta familia, de este señor que ha asumido el cargo de primer ministro. Debe renunciar.
No es la primera vez que los políticos que se ven arrinconados por denuncias de violencia familiar quieren hacer creer que la relación con las víctimas es óptima. Mostrar a su hija es no solamente revictimizarla, sino es atentar contra su dignidad.
“Es congresista y sabe los temores que tienen sus colegas”
Fernando Tuesta Soldevilla, politólogo de la PUCP
Es congresista y sabe los temores que tienen sus colegas: el temor de la disolución del Congreso. Así como la censura del Gabinete y la no confianza son constitucionales, la disolución del Congreso, cumplidos los requisitos, es constitucional.
En el caso de Pedro Cateriano, la diferencia es que se sabía que luego quedaba muy poco tiempo para que ya no se pudiera disolver el Congreso. Ahora no, falta mucho tiempo.
Los congresistas tienen mucho más temor que antes. Creo que no usarían esa segunda bala, porque si eso ocurre hay elecciones y estos congresistas no podrán postular, porque no hay reelección parlamentaria. Lo otro, aunque puede correr por cuerdas separadas, es la situación de Castillo, que se mueve entre la vacancia y la renuncia.