A los pocos días de haber asumido el cargo, el nuevo procurador anticorrupción Amado Enco asegura que la institución que lidera necesita con urgencia recursos humanos y logísticos –más presupuesto– y que su nombramiento ha sido por méritos, no por invitación. Además, anuncia que un equipo especial y exclusivo, que él liderará, se encargará del mayor caso de corrupción en América Latina, que ya llegó al Perú: Lava Jato.
—Entre su designación y su nombramiento oficial pasó un mes, buen tiempo para determinar los principales ejes de su gestión. ¿Qué destacará?Sé que esta procuraduría tiene a su cargo aproximadamente 30 mil casos en todo el país. Estos primeros días estoy haciendo una evaluación de lo que se tiene en términos de carga procesal, de recursos, humanos, logísticos y de lo que necesita para que pueda ejercer debidamente el trabajo de defensa jurídica del Estado, que es una tarea bastante complicada, de muchas responsabilidades.
—Un reporte de la procuraduría indica que solo hay 121 procuradores para esos 30 mil casos. ¿Cómo se puede luchar contra la corrupción con tan poca gente?Es verdad. Si queremos enfrentar la corrupción, implica necesariamente contar con un equipo de profesionales capacitados y en número suficiente. La procuraduría necesita urgentemente pasar por una reestructuración y un fortalecimiento si realmente queremos resultados.
—Ya se reunió con la presidenta del Consejo de Seguridad Jurídica del Estado, Julia Príncipe.He tenido una primera reunión con ella para coordinar las acciones más urgentes. Le he manifestado mis preocupaciones y me ha informado que está trabajando con la ministra Marisol Pérez Tello. La tendencia es que van a ingresar más casos. Hay que estar preparados para eso.
—Uno de los casos de corrupción más sonados de los últimos meses, el del ex asesor presidencial Carlos Moreno, alcanza al propio Gobierno. ¿Le preocupan las presiones políticas?En lo absoluto. Yo he participado en un concurso público, a mí nadie me ha invitado. Actuaré de manera objetiva contra cualquier hecho de corrupción, sin importar el nombre de las personas que puedan estar involucradas. En esto no hay tintes políticos. Vamos a ser firmes con cualquier acto de corrupción, así sea del Gobierno, por hechos pasados o por los que vengan.
—¿Sean altos funcionarios o del entorno presidencial?La lucha contra la corrupción no puede tener excepciones. No tendremos ningún miramiento en proceder frente a un hecho de corrupción venga de donde venga. Esa va a ser nuestra línea.
—Precisamente, un caso complejo que tiene la procuraduría es el de Lava Jato. En Brasil han empezado a declarar los ejecutivos de Odebrecht. ¿Cuáles serán las acciones?Formaremos un equipo de trabajo, en el que voy a involucrarme personalmente, para enfrentar estas investigaciones con una defensa rigurosa del Estado. Estamos mentalizados en ese tema, preparándonos. Sé que el Ministerio Público está recabando también informaciones necesarias y estaremos atentos para participar como corresponde.
—¿El equipo será exclusivo para este caso?Tiene que ser un equipo dedicado de manera exclusiva. Casos de corrupción de esta envergadura implican un trabajo muy difícil, de mucho tiempo, de dedicación permanente.
—¿Usted viajará a Brasil?Haremos las gestiones necesarias para realizar una defensa como corresponde. Si es necesario viajar, lo haremos. Coordinaremos con la fiscalía para contribuir. Por eso es la necesidad de contar con el apoyo del Ministerio de Justicia para poder cumplir con esa tarea.
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Congreso de la República clausuró primera legislatura 2016-2017 ►https://t.co/O9D5DTEGS2 pic.twitter.com/FT1yJbGvam— Política El Comercio (@Politica_ECpe) 20 de diciembre de 2016