Después de cuatro meses de la caída de César Álvarez, ex presidente del Gobierno Regional de Áncash, y su presunta organización criminal, la sensación en la ciudad de Chimbote es que todo sigue igual en la Corte de Justicia del Santa.
Procesos vinculados al tema de corrupción están casi estancados y continúan los cuestionamientos a la gestión y a los cambios de jueces efectuados por el presidente de esa corte, Samuel Sánchez Melgarejo, quien tiene más de 20 investigaciones abiertas en la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA).
Fuentes de la fiscalía y de la Procuraduría Anticorrupción señalaron que es preocupante que las audiencias vinculadas a casos de corrupción constantemente sean suspendidas y reprogramadas.
Indicaron, por ejemplo, que hay por lo menos dos procesos que desde hace más de medio año están listos para pasar a juicio oral, pero ello no puede suceder porque aún no se efectúa el control de acusación. Uno alcanza a ex gerentes del proyecto especial Chinecas; el otro involucra en un caso de enriquecimiento ilícito a Victoria Espinoza, ex alcaldesa del Santa, quien otra vez candidatea al sillón municipal.
Varios magistrados consultados, que prefirieron mantener su identidad en reserva, así como periodistas críticos a la gestión de Sánchez, señalaron que poco se ha hecho para revertir esa situación. Más bien cuestionaron algunas de sus decisiones, como el cambio de jueces, que terminó beneficiando a Álvarez y a sus allegados. También critican nombramientos de personas que estarían vinculadas a los directivos del gobierno regional.
El periodista chimbotano César Quino, quien fue condenado por una querella que le entabló Álvarez, dijo que tenía derecho a dudar de la imparcialidad de Sánchez, porque en su proceso el titular de la corte ordenó, según indicó, el cambio de hasta cuatro jueces. “Un juez que trajo de Huaral dejó la sentencia en un sobre y desapareció. Cumplió su objetivo y se fue”, dijo.
Sánchez niega la versión del periodista. Sostuvo que solo cambió a la jueza inicial porque ella tenía que ir a otro juzgado. En cuanto al juez Mena Quispe, que sentenció a Quino, dice que si bien él lo colocó en el Juzgado Penal Unipersonal que recién se había creado, dicho magistrado tomó el caso del periodista de forma aleatoria. “Allí no tuve nada que ver”, afirmó.
Por la queja del hombre de prensa, la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA) acaba de abrir una investigación preliminar a Sánchez. Según conoció El Comercio, Sánchez tiene en ese organismo 22 indagaciones en trámite, entre investigaciones preliminares y procesos disciplinarios.
A Sánchez también le atribuyen haber cambiado al juez Richard Concepción Carhuancho, magistrado muy incómodo para Álvarez, a fin de que dejara de ver el Caso ‘La Centralita’. “Allí no hubo ninguna irregularidad, solo coloqué a Concepción en el Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria que le correspondía como juez titular”, dijo Sánchez en su defensa.
Igualmente, se atribuye a Sánchez haber puesto a un juez de Huaura, Elard Tejada, en el juzgado que veía el caso del asesinato del fiscal Sánchez Corona. Ese magistrado cambió la orden de detención para el acusado Jack Castillo por el de comparecencia y luego se marchó. Castillo era un proveedor del gobierno regional.
Sánchez precisó que puso a Tejada porque la jueza inicial del caso fue nombrada titular por el CNM y pasó a otro juzgado. Señaló que Tejada estuvo tres meses en el puesto y emitió decisiones de diversos procesos y no solo en el de Jack Castillo.
También se acusa a Sánchez de haber cambiado a una jueza justo cuando iba a dictar sentencia al rector de la Universidad de San Pedro, José Huamán. El reemplazante resolvió “no ha lugar” en la sentencia.
Sánchez dijo que cuando se asume la presidencia de una corte es normal recomponer las salas y eso fue lo que hizo: “No sé qué casos tiene cada juez, hay más de sesenta mil procesos”.
FOTOS CON ÁLVAREZEn abril de este año, el periodista Quino difundió cinco fotografías en las que Sánchez aparece con Álvarez en la serranía de Áncash, en el distrito de Rahuapampa, pueblo del magistrado, durante una fiesta patronal. Para muchos, esas fotos serían una prueba de la cercanía entre ambos, que data de hace más de diez años.
“Esa foto es del 2003, en esa época yo no era presidente de la corte ni Álvarez presidía la región. Esas fotos no prueban nada, era una reunión pública. No tengo ninguna relación con el señor Álvarez”, aseguró.
Por esas fotos también hay una investigación en la OCMA.
Sánchez sostuvo que todas las acusaciones en su contra ya las ha aclarado ante la OCMA y ante la comisión del Congreso que investiga el Caso Áncash.
El congresista Mesías Guevara, presidente de esa comisión, dijo que se evalúa la actuación del actual presidente de la corte del Santa y del anterior, Daniel Vásquez. “Los dos tienen muchas cosas que explicar. Vamos a cruzar la información que dieron con la de la OCMA y el CNM para ver cómo se ha ratificado y cambiado a los jueces”.