Luego del planteamiento del presidente de la República, Martín Vizcarra, para someter a referéndum la reforma política y de justicia a fin de conocer la posición de la ciudadanía, ha surgido un debate sobre la fecha en la que esta consulta podría realizarse.
Para Fernando Tuesta, politólogo y ex jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), es imposible que la consulta se realice el 7 de octubre, junto con las elecciones municipales y regionales.
No obstante, Tuesta remarcó que sí “es conveniente y hasta necesario” que no pase de este año, puesto que otros temas pueden ocupar la agenda y este proceso podría pasar a un “segundo plano”. Para lograr esto, afirmó que solo se requiere una “voluntad política” por parte del Congreso de la República.
El politólogo de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) estimó que, de dársele celeridad a estas reformas, en el Parlamento una revisión de los proyectos tardaría por lo menos tres semanas antes de ser elevados al pleno y luego enviados al Ejecutivo para su promulgación.
“Ahí ya estamos en la primera semana de septiembre. De allí se aprueba en el pleno, el presidente [Martín Vizcarra] tiene que firmar y promulgar. En ese momento, recién el Jurado Nacional de Elecciones realiza la convocatoria”, dijo Fernando Tuesta a El Comercio.
El siguiente paso es que la ONPE solicite al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) un presupuesto adicional para realizar este referéndum a nivel nacional. De llegar a aprobarse, “la ONPE tiene que hacer, a su vez, contrataciones y compras. Con eso ya estamos lejos del 7 de octubre”, indicó Tuesta.
Por ello, consideró viable que la consulta popular se haga la primera semana de diciembre, en el marco de una segunda vuelta regional.
“La organización del proceso es muy complejo, teniendo en cuenta que la ONPE está pasando por una etapa difícil. Cargarla para el 7 de octubre sería presionar y obligar a algo que además requiere una discusión con un poco más de tiempo”, añadió.
En este punto, Fernando Tuesta hace notar un inconveniente: los peruanos residentes en el extranjero no votan durante las elecciones regionales y municipales; sin embargo, en un referéndum, el Estado sí debe permitirles ejercer ese derecho.
Ante ello, expresó Tuesta, es necesario que la ONPE y el Ministerio de Relaciones Exteriores trabajen de forma coordinada. Esta cartera también deberá requerir un presupuesto adicional al MEF.
“Pero aquí lo que importa es cómo se comporta el Congreso y sobre todo la mayoría parlamentaria para llevar adelante el referéndum. Si es que se quiere, se alarga el proceso hasta el punto en que en diciembre tampoco se pueda”, puntualizó.