El arte en todas sus formas es un sentir y expresión de lo que sucede a nuestro alrededor o en la mente del artista. Con esta herramienta podemos plasmar emociones, contextos, desde el más complejo al más sencillo. Encontrar en el arte una manera de ver y cambiar el mundo es para soñadores, sin embargo; no es un imposible y un compatriota peruano nos lo demuestra.
Brian Mayhua López ha logrado lo que muchos peruanos sueñan con alcanzar. Este 2024, el artista plástico ha recibido dos grandes reconocimientos que lo han catalogado como una promesa en el rubro artístico. El primer reconocimiento fue en un concurso de arte Humanidad en el Espacio Cultural Bitcoin en Buenos Aires. La obra presentada fue “Unión de Culturas” representada por un Torito de Pucará que incorporaba en esta milenaria artesanía peruana elementos porteños que permitieron llevar la expresión del mestizaje y la diversidad cultural a un nuevo nivel como puente entre las culturas de Argentina y Perú.
El segundo reconocimiento obtenido fue el “Premio Padre Carlos Mujica” gracias al impacto que han causado sus obras en la ex Villa 31. Este premio tuvo lugar en la Honorable Cámara de Diputados de la Nación Argentina y es un reconocimiento que se entrega todos los años desde inicios de los 80 a todos aquellos que han logrado un gran impacto social en el barrio Padre Mugica. El artista plástico ha logrado acercar a nuestros países a través de sus culturas y se ha convertido en un difusor de nuestra riqueza cultural en el exterior permitiendo su reconocimiento en Argentina y otras partes de Latinoamérica.
La historia de Brian Mayhua comenzó cuando tomó la decisión de migrar a Argentina, llegando al país en marzo del 2016, lugar donde radicaba su tía Dora López, quien lo impulsó a iniciar desde cero allí y perseguir su verdadera pasión, el arte.
Hasta ese entonces, Brian se había desempeñado como técnico electrónico industrial en Perú. A pesar de las mejores posibilidades que este mercado laboral le ofrecía al momento, él no se sentía satisfecho. Lo que lo llevó a tomar la decisión de migrar a Argentina y con ello dejar todo atrás para emprender un nuevo reto. Así llegaría al barrio Padre Carlos Mugica, llamado también ex Villa 31. Este primer contacto e impresión marcaría su carrera artística y propósitos a futuro en el país que lo acogió y le dio la oportunidad de vivir de su pasión.
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En agosto del 2016, Brian Mayhua comenzaría a estudiar Pintura en la Universidad Nacional de Artes (UNA) y a lo largo de su aprendizaje obtuvo premios y becas que siguieron guiándolo por el futuro con el que tanto había soñado. Su recorrido artístico inició con murales en el barrio Mugica, un lugar estigmatizado y conocido por ser habitado por una población inmigrante en Argentina. Mayhua como artista entendió que la primera impresión que se llevó del lugar - uno lleno de alegría, comida y gente - no era la misma concepción que el resto de personas tenía. Por ello, decidió romper con este patrón de prejuicios y estereotipos alrededor del vecindario con su arte.
Es así que inicia su trabajo con murales, pintando figuras representativas en el arte como Frida Kahlo, Salvador Dalí, hasta estrellas más recientes y, casualmente, son los más queridos por los vecinos del barrio Mugica. Estos murales inmortalizan a dos íconos del fútbol argentino, Lionel Messi y Maradonna. Su trabajo en el barrio Mugica le valió el premio del mismo nombre y lo convirtió en un artista referente en el lugar.
A su vez, ha participado en distintas exposiciones de arte en Argentina y/o ha colaborado junto a entidades como el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Consulado General del Perú, Museo de Bellas Artes Manuel Belgrano, Embajada de Perú en Argentina, Embajada de Francia en Argentina, PROMPERU, Fundación y Banco Santander y muchos más. Su labor como artista plástico lo ha llevado a explorar su talento en esculturas, murales, pinturas y demás.
Es así como en un trabajo colaborativo con la Fundación Santander, una de sus obras llegaría hasta el Vaticano. Todo inició cuando la fundación lo contrató para pintar una de sus sucursales ubicadas en el barrio Mugica.
Según lo narrado por Brian, él acudió a la inauguración de la sede con otro de sus trabajos los llamados “toritos de Pucará”, piezas cerámicas emblemáticas de la región sur andina peruana que representan el bienestar, amor, prosperidad y la energía positiva que se busca atraer. Mayhua introdujo a Guillermo Tempesta Leeds, presidente de la Fundación y Banco Santander en Argentina, la historia detrás de los toritos en la cultura andina peruana y ello terminó por convencerlo en adquirir dos modelos.
Es gracias a Guillermo Tempesta y Martín Lozano que estas significativas piezas culturales llegarían a manos del papa Francisco, a razón de una entrevista privada que tuvo lugar en el Vaticano. Dicho momento quedó inmortalizado en un video, material que el mismo artista compartió en sus redes agradeciendo a las personas involucradas en la gestión:
De esta manera, nuestra expresión y diversidad cultural a través del arte ha sobrepasado fronteras por medio del trabajo de un atista plástico que busca promover y dar a conocer nuestro cultura al mundo. Brian Mayhua y su talento son el mejor ejemplo de cómo el arte es un agente de cambio, un excelente conductor de la cultura, costumbres y un fuerte puente para formar lazos de hermandad y conocimiento con otros países. Como dijo alguna vez la artista estadounidense Georgia O’Keeffe sobre el arte: “descubrí que podía decir las cosas con color y formas, cosas que no podía decir de otra manera porque no encontraba las palabras”. Muchas veces el arte y su habilidad innata para expresar logra comunicar mucho más que las palabras.
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