No todo el contenido en Netflix es atrapante. La frase, convertida en un cliché en los tiempos actuales, se torna tal vez innegable cuando aparecen producciones como “Quédate cerca” (“Stay Close”). Y es que, así como la crítica ha sido elogiosa con propuestas como “The Crown”, “Ozark” o “Narcos”, tampoco tendría porqué callarse al momento de decir la verdad: la serie dirigida por Daniel O’Hara y Lindy Heymann es mala. Lo intentaremos sustentar a continuación.
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“Quédate cerca” es una nueva adaptación incluida en el acuerdo que Netflix firmó con el escritor estadounidense Harlan Coben para llevar al streaming al menos 14 de sus libros. Para los que no han tenido la oportunidad de leerlo, este autor nacido en New Jersey ha vendido más de 70 millones de ejemplares de sus novelas, pertenecientes fundamentalmente al género del suspenso y crimen. El texto en el que se basa la miniserie que estamos comentando fue publicado en el primer trimestre del 2012 y alcanzó a posicionarse durante varias semanas como Best Seller del New York Times, mérito que del que no muchos pueden presumir.
Pero un éxito en el campo editorial no asegura necesariamente el mismo resultado en lo audiovisual. “Quédate cerca” está dividida en ocho capítulos y cuenta la historia de Megan Pierce (Cush Jumbo), una exbailarina de un club nocturno que intenta dejar atrás todo lo relacionado con su pasado. Para ello, no solo huyó –literalmente—de su puesto de trabajo, sino que además se cambió el nombre. Y así, tras conocer a un hombre (Dave Shaw/Daniel Francis) se enamora e inicia una relación cuyo resultado fueron tres hijos. Es decir, el final soñado.
Sin embargo, todo en la vida apacible de Megan parece cambiar abruptamente cuando de la nada encuentra en la puerta de su casa una nota dedicada a Cassie, el nombre que solía tener cuando trabajaba por las noches. ¿Quién fue capaz de dar con la casa de Megan? ¿Qué hay detrás de este aviso? Pero fundamentalmente, ¿por qué nuestra protagonista siente pánico de solo pensar que su vida aparentemente enterrada ha regresado?
Algo que queda rápidamente al descubierto en “Quédate cerca” es que estamos frente a una historia de violencia y víctimas. Por su trabajo, Cassie se vio expuesta a decenas de hombres que intentaron acercarse a ella. En este grupo hay, por supuesto, tanto buenos como malos. Uno de ellos, presa de la obsesión, llegó a hacerle la vida imposible. Otro, sin embargo, corrió el camino opuesto e inclusive logró pedirle matrimonio.
Conforme avanzan los minutos, la idea de “traer cosas del pasado” se torna incontrolable. La violenta desaparición de quien atormentaba a Cassie (Stewart Green/Rod Hunt), el regreso de una misteriosa cajera del local donde Cassie bailaba (Lorraine Griggs/Sarah Parish), pero además amigos cercanos de la protagonista vuelven a la vida –17 años después—como si nada, forzando un recurso clave en novelas y películas: la verosimilitud.
Como en cualquier película criminal, con crímenes y sangre por doquier, “Quédate cerca” incluye detectives y asesinos. La primera pareja está conformada por Michael Broome (James Nesbitt, el mejor desempeño en todo el elenco) y Erin Cartwright (Jo Joyner), mientras que la segunda la integran una dupla que en su intento por generar miedo fracasan rotundamente, luciendo en varias ocasiones más como el Equipo Rocket en Pokémon que como un par de sicarios a sueldo. Barbie (Poppy Gilbert) y Ken (Hyoie O’Grady) ejecutan acciones que carecen del más mínimo sustento, como bailar coreografías antes de ‘ejecutar’ sus actos violentos, o como planear un romántico futuro juntos antes de apuñalar a alguien por encargo.
Sería injusto analizar una serie como “Quédate cerca” sin comentar el desempeño de Cush Jumbo como protagonista. Forzada por un guion a todas luces irregular y por momentos ilógico, la actriz británica hace lo que puede para darle vida a una mujer que huye de su pasado, siendo por momentos sumamente valiente como para enfrentarse en el suelo con un sicario armado con un cuchillo, y en otros más bien cobarde como para ocultarle algo bastante simple a su hija mayor.
Sin ánimo de lapidar esta nueva producción de Netflix, resulta correcto decir que, en sus dos últimos episodios, “Quédate cerca” toma un segundo aire. Con la verdad casi a flote y en un mix absolutamente insólito entre personajes del pasado y el presente, la serie basada en el libro de Harlan Coben se convierte en un thriller absoluto, en el que honorables detectives como Michael Broome descubrirán qué tan fácil puede ser dormir con el enemigo, mientras vemos cómo Cassie (Megan) y su familia luchan desesperadamente por sus vidas.
Salvo estos últimos dos detalles, la producción de Netflix no cumple las expectativas y, en caso usted llegue a concluir sus ocho episodios de casi una hora de duración, muy probablemente pueda sentir que, lamentablemente, perdió su tiempo.
LA FICHA:
Sinopsis: Cuando Carlton Flynn desaparece la misma noche que Stewart Green, pero 17 años después, se desencadena una serie de eventos en la vida de las personas vinculadas a ambos.
Título original: “Stay Close”.
Elenco: Cush Jumbo,James Nesbitt,Richard Armitage
Duración: 2 horas y 10 minutos
Clasificación: +16 años
Género: Crimen, Thriller, Drama