Desde que las periodistas Erin Lee Carr y Jenny Eliscu, asumieron en 2019 la responsabilidad de hacer realidad el documental “Britney vs Spears”, recibieron miles de documentos confidenciales y correos electrónicos que daban pistas sobre el caso de tutela permanente de ‘la Princesa del pop’. Lo que tenían en sus manos no era un material cualquiera, sino que se trataba de datos inéditos que ponían en evidencia el abuso que se estaría cometiendo con la libertad de la cantante de 39 años desde el 2008, fecha en que Jamie Spears, asumió el control temporal de la vida de su hija.
Según revela el documental, a mediados de 2020, una fuente anónima contactó a Lee Carr y Eliscu para “que se sepa toda la verdad” acerca del caso Britney. Entonces, lo productores del proyecto empezaron a corroborar el contenido de la información filtrada, compuesta por más de 300 páginas.
“Este es un informe confidencial que pocas veces han visto. La mayoría de los médicos y profesionales no se vinculan públicamente con el caso y me gustaría que siga así. El reporte fue hecho por un médico que renunció al caso en 2013″, se les escucha decir a las dos periodistas.
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El documental, que se estrenó en Netflix un día antes que una audiencia en la Corte Superior de Los Ángeles resuelva el futuro de la tutela legal de la cantante y dos semanas después de la renuncia de Jamie Spears a la tutela de su hija, pone en foco el clamor de la cantante que se hizo público hace unos meses: “Solo quiero recuperar mi vida” a través de un audio.
“Su señoría, mi papá y todos los involucrados en la tutela deberían estar en la cárcel. (...) Lo que he vivido es bochornoso y desmoralizador y por eso nunca lo dije abiertamente. No quería decirlo abiertamente porque pensé que nadie me creería. (...) Solo quiero recuperar mi vida. Pasaron 13 años. Ya basta. No tiene sentido que el estado de California sea testigo de cómo me gano la vida para tanta gente y me declare incapaz. Pero soy excelente en lo que hago. Me siento atada e intimidada, me siento excluida y sola. Y estoy cansada de sentirme sola. Merezco tener los mismos derechos que cualquiera por tener un hijo, una familia, todas esas cosas. Es todo lo que quería decir. Muchas gracias por dejarme hablar con usted hoy”, dijo Britney Spears el 23 de junio en la audiencia de la corte y está incluido en el documental de Erin Lee Carr y Jenny Eliscu.
“Britney vs. Spears” no solo tiene un tinte riguroso con la información, también genera una sensación de reflexión y empatía, algo que debe ser analizado desde su propuesta documental subjetiva. Las documentalistas se ponen del lado de la cantante y valoran cada uno de sus pasos.
Erin Lee Carr, se presenta como una fanática de Britney Spears en los inicios millonarios de la estrella entre 1998 y 2003. Jenny Eliscu, por su parte, no fue hasta que trabajó con la cantante para un artículo de la revista Rolling Stones, que descubrió lo “agradable y dulce” que es esta como persona.
Años después, cuando la conoció, obtuvo un “Gracias” por parte de Spears, al terminar una importante y secreta conversación. Era esa costumbre de agradecer con respecto a todos con quienes trata, incluido el juez que escuchó su segunda declaración sobre la custodia de su padre en la corte, mencionada líneas arriba.
“Britney vs Spears” presenta, además, entrevistas exclusivas. Por ejemplo, con el abogado de Kevin Federline, el exesposo de la cantante; el productor (antes) amigo de Spears, Sam Lutfi; la exasistente de la artista, Felicia Culotta; y más. Y lo que revelan es ese secretismo en la vida de ella, una mujer acosada por la prensa que estuvo envuelta en un círculo vicioso tóxico del trabajo y la familia, donde no tenía decisión, a pesar de su talento y una fortuna de más de 60 millones de dólares. “No quiero hablar de eso”, “Pruébamelo” o simplemente silencio culposo es lo que se escucha en esa serie de testimonios que enmarcan el trauma de ‘la Princesa del pop’, y a la par, las cineastas exponen la perspectiva de la justicia estadounidense.
Entonces, hay una mirada documental clara: ‘Britney’ es la víctima y merece la libertad. El argumento es válido, cuando todas las partes dan su opinión, excepto las dos principales, aunque en el caso de ella, se muestra un breve video en el que explica su dolor ante la situación. Mientras el padre y los agentes comerciales seguían ganando millones de dólares con la carrera de la cantante, una oscuridad terrible la sumergía hasta lo más profundo, pero ella mantenía la sonrisa.
En los últimos minutos de la película, que no deja parpadear ni un segundo, estalla el testimonio más importante, el de ella en la corte. ¡Boom!
¿Qué decir de “Britney vs Spears”? Entretenido y enriquecedor, sí, para quienes no son seguidores del movimiento #FreeBritney. Apasionante, también, para los que conocen o compadecen a la artista. Pero, sobre todo, digerible, estremecedor y humano. Un documental totalmente recomendado.
FICHA
Sinopsis: Dos cineastas exploran la lucha por la libertad de Britney Spears con entrevistas exclusivas y pruebas confidenciales.
Duración: 1 h 30 m
Formato: Documental
Elenco: Jenny Eliscu, Jordan Miller, Tony Chicotel, Sam Lutfi, entre otros
Clasificación: +16
Año: 2021
Series similares: John y Yoko, above us only sky (Netflix), Justin Timberlake (Netflix)
Calificación del autor: ★★★★
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