En 1997 se publicó “Killing Floor” (“Zona Peligrosa”), la primera entrega de una extensa serie de novelas de acción escritas por el estadounidense Lee Child. Desde entonces, y en un número que llega hasta las 26 entregas, millones de lectores han seguido de cerca la historia de Jack Reacher, el veterano militar que protagoniza estas historias.
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Quince años después de este primer libro la historia imaginada por Child sería llevada al cine de la mano del director Christopher McQuarrie y protagonizada nada menos que por Tom Cruise. El detalle del rol protagónico elegido no es menor. Y es que este mediático promotor de la cienciología es, físicamente, distinto al Jack Reacher creado por Child: uno apenas llega al metro y setenta centímetros de estatura y el otro casi toca los dos metros.
Aunque ciertamente la película y su posterior secuela no fueron ‘taquillazos’, decir entonces que las adaptaciones de este personaje literario no daban para más hubiera sido un error. Así lo demuestra “Reacher”, una serie de ocho episodios que Amazon Prime Video acaba de estrenar, aunque esta vez protagonizado por un actor menos premiado y famoso que Cruise, pero mucho más cercano a la fisionomía del veterano que creó Child: Alan Ritchson.
El regreso del héroe blanco y fornido
Para quienes no han podido leer ninguno de los libros escritos por Lee Child, “Reacher” (adaptación de “Killing Floor”) cuenta la historia de Jack Reacher (Alan Ritchson), un veterano de guerra que llega a Margrave, Georgia, por una recomendación sin mayor importancia. De pronto, mientras come un pastel de manzana y bebe un café, es intervenido por la policía, quien lo trata como principal sospechoso de un cruel asesinato ocurrido la noche anterior.
Aunque nuestra intención no es centrarnos en lo portentoso del aspecto de Reacher, no puede soslayarse que el aspecto de este héroe inicialmente silencioso (durante los primeros minutos simplemente no habla) marca su forma de interactuar con casi todos los personajes de la serie. La mayoría de quienes lo tratan por primera vez lo subestiman, vinculando lo portentoso de su apariencia con una lentitud o estupidez que conforme pasan los minutos va quedando desvirtuada por completo.
Entre tanto héroe y súper héroe adaptado a tiempos políticamente correctos, Alan Ritchson dando vida a Jack Reacher es ciertamente un retroceso al viejo modelo estadounidense del héroe blanco, fornido y cautivador
Efectivamente, tras dejar en claro que no tuvo nada que ver con el asesinato, nuestro protagonista se verá envuelto en un trabajo no buscado: el de detective. Pero no lo hará solo. Para ello deberá, en primer lugar, acercarse a la policía del condado (Roscoe Conklin/Willa Fitzgerald) y, en segundo lugar, al jefe detectives de la zona (Oscar Finlay/ Malcolm Goodwin). Con cada uno de ellos cultivará un vínculo distinto, aunque notablemente honesto (y en el caso de ella, incluso sexual).
Durante los ocho episodios de la serie, el poblado de Margrave se verá remecido por una serie de asesinatos selectivos y bastante crueles. En su afán por encontrar pistas, el detective Finley y la oficial Roscoe aceptarán poco a poco la ayuda de Reacher, quien rápidamente demostrará que no es solo un saco de testosterona y masa muscular, sino un investigador paciente e imaginativo.
Pero sería un error decir que la serie de Prime Video nos muestra solo a un gigantón acertando en el hallazgo de las pistas de sucesivos asesinatos (que incluyen a su hermano, vale decir). Ningún prototipo de héroe de Marvel queda libre de usar su bien trabajada figura para repartir golpes a diestra y siniestra. Y ese es uno de los aspectos positivos de la serie. Al meticuloso trabajo de Roscoe y Finlay se suma un Reacher que se vale de su capacidad física para darle una paliza a todos los mafiosos y corruptos que se le pongan en frente. A esto habría que sumar un elemento más emotivo, infaltable en una serie que no busca ser catalogada como plana o gris. Esta producción ideada por Nick Santoro también tiene momentos emotivos. A lo largo de sus ocho episodios, Reacher irá rememorando momentos claves de su infancia y también de su época como militar. En la primera parte veremos cómo fue criado en una familia seria y de trato vertical, mientras que, en la segunda, queda claro de dónde salieron aspectos como su respeto a las reglas y su lealtad a los compañeros.
Queda claro que “Reacher” no parece destinada a ganar grandes premios. Revisándola críticamente, parece ser una serie más sobre buenos contra malos. Aquí los primeros han evidenciado pequeñas capas que pueden resultar interesantes en una segunda temporada (Fitzgerald y Goodwin tienen muy buenos momentos, pero resultan ciertamente opacadas por Ritchson). Sobre los segundos, la sensación es algo decepcionante. Entre tanto policía, funcionarios corruptos, ‘niños ricos’ y matones, muchas veces no queda claro quién es ‘el villano’ de esta serie. Nada de esto, sin embargo, es un motivo para dejar de ver una serie entretenida.
Entre tanto héroe y súper héroe adaptado a tiempos políticamente correctos, Alan Ritchson dando vida a Jack Reacher es ciertamente un retroceso al viejo modelo estadounidense del héroe blanco, fornido y cautivador. Y los ocho primeros episodios de la serie demuestran que la decisión no fue para nada un error.
LA FICHA:
Sinopsis: Cuando el policía militar retirado Jack Reacher es arrestado por un asesinato que no cometió, se encuentra en medio de una conspiración mortal llena de policías corruptos, empresarios turbios y políticos intrigantes. Con nada más que su ingenio, debe averiguar qué está pasando en Margrave, Georgia.
Título original: “Reacher”
Duración: 8 capítulos
Clasificación: +18 años
Género: Acción