La velocidad con la que el brazo se aproxima al rostro de su rival. La agilidad para esquivar su respuesta. La danza de unos pies que necesitan también inteligencia. Ovaciones en los rings, aunque la vida ponga al púgil contra las cuerdas. Esta historia no sucede en la Nueva York del Jake La Motta de El Toro Salvaje o en la Filadelfia de Rocky Balboa, sino bajo el cielo huancaíno, en pleno corazón del Valle del Mantaro. Peso Gallo cuenta el día a día de Enrique, un joven cuyo máximo sueño es convertirse en boxeador profesional. Sin embargo, antes tendrá que enfrentar otras luchas: la carencia de dinero, la falta de oportunidades o el nulo apoyo de su padre. Paralela al argumento, la realización de la película tiene su propia épica.
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“Perú es un país muy centralista. La mayoría de equipos, materiales o técnicos especializados se encuentran en Lima, lo que siempre eleva el presupuesto para filmar en Huancayo u otra provincia. Además, cuando inicié el proyecto, casi nadie sabía que había box en Huancayo”, nos cuenta Hans Matos Cámac, director del filme y quien, en el 2015, realizara el western andino Pueblo viejo. “Es un problema del país que se refleja en el cine peruano y en otras industrias”, agrega el cineasta.
A pesar de que ganó el fondo de largometrajes de DAFO en el 2018, tuvo que hacer malabares con el presupuesto para poder sacar adelante la película. Además, ya que en Huancayo no hay centros de formación actoral, su primer paso fue hacer un casting con los jóvenes boxeadores del IPD de dicha ciudad y prepararlos para que interpreten sus propios papeles. Este taller, y el proceso de filmación, cambiaron sus vidas.
“Estar en esta película es una de las cosas de las que más orgulloso me siento en la vida. No puedo esperar a verla. Nunca imaginé hacer una película sobre box. Quiero verla varias veces”, nos dice Max Huiza, el joven boxeador –y hoy también actor– que da vida al protagonista del filme, con el que comparte sueños, inquietudes y sacrificios. “Hacer box en Huancayo es duro –nos cuenta–, porque a veces uno espera el apoyo que necesita, pero no recibe casi nada. Cada boxeador tiene que buscar auspicios para seguir adelante”.
Como para demostrar su fortaleza, en un reciente torneo de box, realizado en Huancayo, Max/Enrique salió campeón. Por eso, Hans Matos define Peso gallo a través de sus ojos: “La idea central del filme es que la pelea es la vida. La pelea es la lucha interna del personaje. El mensaje es que, a pesar de todas las dificultades que hay, hay que seguir adelante en el box, en el cine o en la vida”. //
Deporte peruano en pantalla grande
Cholo (Bernardo Batievski, 1972). Inspirada en la vida de hugo ‘Cholo’ Sotil, rutilante figura de la selección peruana, Alianza Lima y Barcelona de España. Protagonizada por el mismo jugador en el momento cumbre de su fama, fue recientemente restaurada por su 50 aniversario.
Prueba de fondo (Christian Acuña y Óscar Bermeo, 2018). Retrata la realidad de un grupo de maratonistas del ande peruano, encabezado por la multicampeona sudamericana y panamericana Inés Melchor, quienes nos revelan sus historias de superación.
Siguiendo a Kina (Sonia Goldenberg, 2016). Documental que cuenta la historia de tres mujeres boxeadoras: una pastora de Puno, una chica del Callao y Kina Malpartida, primera peruana en ganar un título mundial de boxeo.