Niños a medida: una empresa de biotecnología estadounidense ha logrado una patente en ese país para la concepción de bebes a la carta, confirmó hoy una portavoz de la firma californiana 23andMe, que sin embargo aseguró que no pondrá en marcha esta práctica. Sus críticos, sin embargo, ya han dado la voz de alerta.
Nunca pretendimos ni queremos tampoco ahora ampliar nuestra oferta más allá del cálculo de familias, dijo la portavoz. Ese cálculo permite que los padres que entregan pruebas de ADN puedan hacer pronósticos sobre el color de pelo, ojos o propensión a la enfermedad de sus hijos. Para ello, la empresa evalúa información genética.
Pero los críticos advierten de posibles abusos. Las ideas de negocio que se refieran a la producción de bebes a la carta no pueden ser apoyados por una patente, dijo el director ejecutivo de Testbiotech, el Instituto Independiente de Evaluación del Impacto de la Biotecnología de Múnich.
La identidad genética de una persona no puede depender de la moda, el mercado y la opinión, considera Then, que ve en esa práctica una violación de la dignidad humana.
Y es que la patente permitiría a la firma seleccionar óvulos y espermatozoides a través de los datos genéticos de los donantes. Así, los padres interesados podrían elegir donante según criterios como el color de ojos, longevidad o características atléticas, contó la firma en Múnich.
Las posibilidades de elección son numerosas para tener un bebe con una alta probabilidad de un determinado color de ojos o de pelo, o con tolerancia a la lactosa o complexión deportiva, por ejemplo.
La empresa 23andMe de Mountain View ofrece en su web sobre todo tests de ADN con lemas como Lo que su ADN dice de usted o Descubra el origen de sus antepasados.
Registrar patentes es una parte totalmente normal de nuestro negocio y estamos obligados por nuestro principio fundamental de permitir el acceso a las personas de sus propios datos de ADN, así como a ser innovadores en la investigación y transparentes frente a nuestros clientes, dijo la portavoz.