WASHINGTON. Algunas partes de la Amazonía de Brasil y Colombia estuvieron sumergidas temporalmente bajo el mar en al menos dos ocasiones en la antigüedad, informó un grupo de investigadores en un artículo en la revista “Science Advances”.Seguir a @tecnoycienciaEC !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Los investigadores, encabezados por Carlos Jaramillo, del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales de Panamá, establecieron que el período en el que la parte noroccidental de la Amazonía estuvo bajo agua salada fue la época del Mioceno, entre 23 y 5 millones de años atrás. “Es difícil imaginar un proceso capaz de cubrir un bosque tan grande con un océano”, señala el experto.
La hipótesis de que la Amazonía fue inundado por un océano es motivo de debate entre los científicos, pero adquirió fuerza en los 90 cuando especialistas encontraron microorganismos marinos en los sedimentos amazónicos.
Hoy en día, alrededor del 80% del paisaje amazónico está ocupado por bosques de secano en los que son escasas las inundaciones, mientras que alrededor del 20% se caracteriza por humedales.
Para entender las biodiversidad del Amazonas es importante tener en cuenta estos episodios de inundación por el mar, asegura el estudio científico, en el que también participaron investigadores de la Universidad de Illinois (EE.UU.), de la de Birmingham (Reino Unido) y de la del Norte (Colombia).
Para llegar a sus conclusiones, Carlos Jaramillo y sus colegas examinaron los núcleos de sedimentos de la cuenca de Llanos, en el este de Colombia, y las cuencas de Amazonas/Solimões, en el noroeste de Brasil, donde hallaron 933 microfósiles, además de un diente de tiburón y un camarón mantis fosilizados.
Los resultados de los estudios indicaron que las aguas marinas poco profundas cubrieron la región al menos dos veces durante el Mioceno, en dos eventos de inundación distintos que fueron relativamente efímeros.
El trabajo también confirmó que, en los últimos 20 millones de años, el paisaje amazónico ha registrado grandes cambios.
Fuente: EFE