A la hora de aprender, la postura importa. Los estudiantes piensan mejor de pie que si se sientan en una silla. Ese es el hallazgo de un nuevo estudio publicado en la revista International Journal of Health Promotion.Seguir a @tecnoycienciaEC!function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Los seres humanos, indica la investigación, prestamos más atención y nos sumergimos más en el aprendizaje cuando nos encontramos de de pie que cuando estamos sentados, con las manos cruzadas y la espalda encorvada.
Si se aprendiera mientras se está parado, el resultado, dicen los científicos, equivaldría a sumar 7 minutos más a cada hora de participación en un entorno académico.
Para demostrarlo, Mark Benden y sus colegas del Centro de Salud Pública de la Universidad de Texas A&M trabajaron con casi 300 alumnos de primaria durante un año escolar cambiado el mobiliario tradicional de pupitres por escritorios de pie, que son muebles altos con bancos que permiten a los estudiantes elegir si prefieren permanecer de pie o sentados.
Aunque originalmente estos muebles fueron implementados en las aulas para reducir la obesidad infantil, el experimento ha demostrado que este cambio de mobiliario podría acompañarse también de beneficios cognitivos y contribuir al éxito académico.
Estudios previos de este equipo habían demostrado que los escritorios para trabajar de pie pueden ayudar a reducir la obesidad porque permiten quemar un 15 por ciento más calorías que cuando se estudia sentado.
Según el equipo de investigadores, las estaciones de trabajo en las que se puede estar de pie disminuyen el déficit de atención al proveer un método diferente que rompe con la monotonía del trabajo tradicional.
Fuente: Cienciaxplora.com