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Médicos del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN) realizaron por primera vez una intervención quirúrgica para extirpar tumores cerebrales mientras el paciente se encontraba despierto.
Este procedimiento es utilizado ya en otros países y lleva el nombre de mapeo cerebral. Consiste en colocar electrodos en el cerebro de la persona con la finalidad de estimular ciertas áreas importantes, como la del lenguaje y la motora, y provocar una respuesta. De esta manera, el médico puede determinar sus ubicaciones exactas y evitar dañarlas durante la extirpación del tumor.
Asimismo, se le pide a la persona que realice leves movimientos e identifique imágenes con el objetivo de analizar las repercusiones de cada acción en el cerebro.
Según explicó a El Comercio el doctor Luis Ojeda, jefe del Departamento de Neurocirugía del INEN, se utilizó este método para tratar un tumor maligno de seis por siete centímetros, el cual estaba provocando en un paciente graves dolores de cabeza, convulsiones y alteraciones en el lenguaje. La operación duró aproximadamente cuatro horas y contó con la participación de más de 10 especialistas.
“Con este tratamiento logramos menos secuelas en el paciente. Antes había la posibilidad de dañar un área importante del cerebro por tratar de sacar la mayor cantidad de tumor. Esto ocasionaba que la persona saliera con un déficit motor”, precisó.
UBICANDO AL ENEMIGO
Ojeda recalca un punto muy importante: muchas investigaciones previas ya han determinado las funciones de cada una de las zonas del cerebro.
No obstante, la aparición del tumor puede empujar estas áreas y dificultar su detección. Además, “en este órgano todo es parecido, y cuando uno realiza una abertura no la hace grande como para ver todo”, advierte. Por eso, el mapeo cerebral ayuda a dar con el lugar exacto de estas áreas sensibles y le da la oportunidad a los galenos de crear rutas seguras para llegar al tumor.
Al finalizar el tratamiento, el paciente debe complementarlo con radioterapia o quimioterapia, dependiendo del diagnóstico.
EL RIESGO LATENTE
Gran parte de los casos de cáncer al cerebro implican tumores malignos. Esto significa que no se pueden curar; por lo tanto, la extirpación, la radioterapia y quimioterapia son las mejores soluciones para aumentar el tiempo de sobrevida.
Respecto al Perú, de los más de 40 mil casos de cáncer que se registran al año, solo un 5% corresponde a tumores del sistema nervioso: “Son escasos, pero el índice de mortalidad e impacto es importante”, explica el especialista del INEN.
Antecedente
Médicos de EE.UU. extirparon tumor cerebral mientras el paciente tocaba la guitarra.