Hace mucho tiempo en Persia un siniestro visir encerró en una torre a una joven princesa, luego que su padre viajará a tierras muy lejanas. Sin embargo, un héroe hace su aparición para rescatar a la damisela en apuros. Utilizando su increíble agilidad y su habilidad para evadir obstáculos, el protagonista sin nombre podrá salvar a su amada.
Esa es la trama de “El Príncipe de Persia”, un juego que logró cautivar y sorprende con el realismo de los movimientos del protagonista. Pero sabes cómo se logró incorporar esa naturalidad en los saltos. En 1985, Jordan Mechner, creador del clásico videojuego, grabó a su hermano corriendo, saltando, caminando y escalando muros. Aunque no lo creas, esos mismos movimientos fueron digitalizados e incluidos en el protagonista.
Para llevar el realismo al computador, Mechner se basó en una técnica llamada rotoscopio, que consiste en remplazar los fotogramas de una grabación real por dibujos calcados. De esta forma, el héroe pudo moverse de la misma forma cómo lo haría una persona real.
Finalmente, en 1989 el videojuego salió a la venta para la Apple II. El éxito fue tan gran que no sólo se expandió a varias plataformas, sino que dio origen a una de las más grandes franquicias del mundo de los videojuegos.
Estos fueron los movimientos del hermano de Mechner.
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Ahora compáralos con los del protagonista del videojuego.
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