El drama de “Roseanne” continúa. La comedia noventera, que tuvo un exitoso regreso este año por el canal ABC pero que fue cancelada a consecuencia de las palabras de su protagonista, no solo significó la pérdida de trabajo para los artistas. La responsable del escándalo se pronunció sobre ello.
Vía Twitter, Roseanne Barr dijo haberle pedido al presidente del grupo televisivo Disney-ABC Ben Sherwood la posibilidad de disculparse públicamente. “Le rogué no cancelar la serie. Le dije que estaba dispuesta a hacer cualquier cosa y le pedí ayuda en hacer lo correcto. Había trabajado haciendo publicidad para ellos gratis por semanas, viajando, a pesar de tener bronquitis. Le rogué por los trabajos de la gente”, sostuvo la actriz.
El comentario de Roseanne Barr hizo referencia a Valerie Jarrett, ex asesora del ex presidente Barack Obama. Con sus polémicos mensajes en Twitter —los cuales han sido eliminados— dijo que la mujer parecía el hipotético hijo de los Hermanos Musulmanes y el Planeta de los Simios. Los padres de Jarrett, vale resaltar, son afroamericanos.
Barr contó más de su conversación con Sherwood: “Él dijo: '¿Qué estabas pensando cuando hiciste eso?' Yo dije '¡Pensé que ella era blanca, se ve como mi familia!' Él se burló y dijo 'lo que has hecho es enorme e imperdonable.'”
Tras la cancelación de “Roseanne”, varios actores de la serie se pronunciaron sobre ello. “Los comentarios de Roseanne sobre Valerie Jarret son aborrecibles y no reflejan las creencias de nuestro reparto, equipo o cualquiera de los involucrados en nuestro show”, escribió Sarah Gilbert, quien da vida a Darlene Conner-Healy.
Por su parte Roseanne Barr, que se disculpó en Twitter, culpó a un somnífero del comentario que desencadenó la cancelación de la serie. Sanofi, fabricante de la medicina, dijo que el racismo “no es efecto conocido” de ninguno de sus productos.