Cuando se viaja en avión uno de las primeras indicaciones que se les da a los usuarios es que deben colocar el celular o dispositivos en “modo avión” para evitar que haya interferencias entre la aeronave y los controladores aéreos. De esta forma, se busca reducir las probabilidades de que ocurra un accidente aéreo.
Pero, al parecer el “modo avión” en los vuelos ya tiene los días contados. Esto gracias a que a partir de junio de 2023, se podrá hablar por teléfono a bordo de los aviones en vuelos dentro de la Unión Europea. Esto fue confirmado por la Comisión Europea, que va a asignar frecuencias específicas de la nueva telefonía 5G para permitir la conectividad móvil a 38.000 pies de altitud.
Esta decisión, permitirá que los pasajeros ya no necesiten conectarse a la red wifi interna que proporciona la aerolínea para poder navegar, publicar en redes sociales o utilizar diferentes aplicaciones de mensajería instantánea. De esta forma, a partir de junio de 2023 podrán conectarse con sus propios datos de su teléfono y, lo más importante es que podrán recibir y realizar llamadas a bordo, tanto en la tierra como en el cielo.
Cómo funciona esta tecnología
Para el próximo año, las aerolíneas deberán instalar una estación red en su flota para permitir el envío de llamadas, mensajes o el tráfico de datos a través de una red satelital, por lo que la inversión por parte de las aerolíneas será alta. Aunque no solo para ellos, los pasajeros a pesar de utilizar sus propios datos al usar redes en tierra de más de un país, se generará un coste de roaming. Y a pesar de que aún se desconocen las tarifas, se calcula que los precios no serán bajos.
Vale recalcar que esto solo funcionará en vuelos con bajas altitudes y condiciones atmosféricas favorables.
¿Será seguro utilizar el celular en el avión?
Hace unos meses, aerolíneas como Emirates, Japan Airlines, United, Delta o American Airlines enviaban una carta conjunta a los principales organismos de seguridad sobre la situación de las aerolíneas y el 5G, incluso, algunas de ellas, cancelando vuelos alegando motivos de seguridad. En Estados Unidos, especialmente, hubo un gran revuelo sobre el tema.
Esto se da debido a que para la correcta aeronavegabilidad del avión: la red 5G, la nueva generación de telefonía móvil, puede interferir con la tecnología del avión en fases críticas, como la del aterrizaje automático en casos de, por ejemplo, baja visibilidad.
Ignacio Rodríguez, comandante de una aerolínea española, explicó que la preocupación de las aerolíneas tiene una explicación fundada: “el problema está en el radioaltímetro, que es un aparato que lanza una señal al suelo, la recibe de nuevo y en ese tiempo calcula la distancia a la que está el avión, una herramienta fundamental en los aterrizajes automáticos en los que el piloto no ve nada fuera, y es el avión el que va calculando la distancia”.
“En Europa la situación es completamente distinta porque los márgenes de las frecuencias son mayores y no hay peligro de interferencias”, explica el diario El País.
En Europa, la propia EASA (Agencia Estatal de Seguridad Aérea), emitió un comunicado explicando la “estrecha colaboración con los fabricantes de aeronaves, las autoridades nacionales de aeronavegabilidad y los reguladores nacionales para evaluar el riesgo de interferencia de 5G/radioaltímetro en el espacio aéreo de la UE, la susceptibilidad de las aeronaves a dicha interferencia, el efecto de dicha interferencia en los sistemas de aeronaves y el subsiguiente efecto sobre la seguridad de las operaciones de vuelo”.