Las protestas de los últimos días han obligado a cerrar aeropuertos en las regiones de Apurímac y Ayacucho, para garantizar la integridad de los pasajeros y de los trabajadores, pues algunos ya han sido blanco de ataques.
El primer aeropuerto que suspendió sus operaciones fue el de Andahuaylas (Apurímac), ya que protestantes dañaron seriamente la pista de aterrizaje y equipos indispensables para brindar los servicios de navegación aérea. Además, incendiaron la sala de transmisores y la sala de combustible, y cercaron amenazantes el terminal aéreo.
Aeropuertos Andinos del Perú (AAP) informó anoche del cierre del Aeropuerto Alfredo Mendívil Duarte de la ciudad de Ayacucho, desde las 00:00 horas del jueves 15 de diciembre, para poner a buen recaudo su infraestructura. Las Fuerzas Armadas advirtieron que un grupo de manifestantes buscan irrumpir en el terminal aéreo, poniendo en riesgo la seguridad de los pasajeros, personal y toda la comunidad aeroportuaria.
La suspensión de las operaciones en los citados aeropuertos —que están fuertemente resguardados por la Policía Nacional— perjudica a los pasajeros que deben reprogramar sus vuelos y postergar su llegada a su destino final aunque tengan alguna emergencia. A la par las pérdidas económicas en el sector turismo siguen en aumento.