1. Abraza
Envolver en tus brazos a una persona es la mejor muestra de afecto. Así puedes decirle también –sin necesidad de emplear palabras– que te importa y que siempre la apoyas. Acompaña tu abrazo con una sonrisa genuina y este regalo será memorable.
2. Comparte
Momentos especiales con tu familia. En Navidad tanto los pequeños de la casa, como los adultos, esperan crear recuerdos para el futuro. Y es precisamente eso lo que todos más recuerdan de estas fiestas: el tiempo en familia, las risas, los abrazos, las anécdotas.
3. Recuerda
A los que están lejos y a los que ya se fueron. Ten presente a los que están contigo. Recuerda los buenos momentos, pero también los ingratos. Las buenas acciones y aquellas de las que no estás tan orgullosa. Recuerda pedir perdón si es necesario. Recuerda lo que has vivido y lo que aún te queda por hacer.
4. Agradece
Sentir gratitud incondicional, por lo que tienes y tus seres queridos, y convertir este sentimiento en hábito de vida te hace feliz. Agradece a quienes está n contigo y a los que no, lo bueno que ocurre en tu vida y también aquellos actos que te molestan, incomoda n o irritan. Ser agradecido te hace feliz y también a quienes diriges las gracias.
5. Disfruta
No importa si compraste o no el juguete que tu hijo quería, si el pavo te quedó salado o si se manchó el mantel justo antes de la cena... Para que la Navidad sea una verdadera fiesta, disfrut a estar con tus seres queridos, acepta su cariño, agradece sus son risas.