Follow @viu_ecpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Tráfico, ruido, estrés, mal humor. Estas son algunas palabras con las que podemos relacionar el manejar en una ciudad como la nuestra. Y aunque estar al volante pueda ser un dolor de cabeza en ocasiones, hay otras que puede ser el momento que más disfrutamos.
¿Cuántas veces te has detenido a pensar en lo genial de manejar? Poder moverte de un lado a otro sin problemas, tener la libertad de acomodar tus tiempos pues transportarte ya no es impedimento o simplemente pasar unos minutos en completa soledad para pensar.
Si se te hace difícil ver el lado positivo de manejar, te decimos ocho situaciones en las que no hay nada mejor que hacerlo. ¿Se te ocurre alguna otra? (function(d, s, id) { var js, fjs = d.getElementsByTagName(s)[0]; if (d.getElementById(id)) return; js = d.createElement(s); js.id = id; js.src = “//connect.facebook.net/en_US/sdk.js#xfbml=1&version=v2.4&appId=465882020151522”; fjs.parentNode.insertBefore(js, fjs);}(document, 'script', 'facebook-jssdk'));VIÙ