Es probable que a tus amigas lo hayan comentado o que en artículos de belleza hayas leído del microblading, pero más allá de ser una técnica novedosa de maquillaje, está dando que hablar en el mundo de la estética.
Primero detengámonos en lo esencial: ¿Qué es el microblading? Se trata de una técnica de maquillaje semipermanente que tiene como objetivo corregir y reconstruir una ceja despoblada logrando una mirada más profunda y definida.
“El microblading se realiza con un inductor manual y una navaja de varias agujas, con lo cual, se van dibujando los vellos en forma natural y superficial, depositando el pigmento solo en la epidermis de la piel”, explica Ana María Panéz, cosmiatra del Centro de Estética Bell-An.
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¿Las ventajas de esta técnica? Ahorrarás tiempo y energía, pues ya no tendrás que retocarlas todas las mañanas antes de salir de casa: lucirás unas cejas espectaculares siempre. Además, el resultado final puede durar de uno a dos años, es un procedimiento indoloro y el aspecto de la ceja es muy natural.
¿Algunas recomendaciones? Si ya tomaste la decisión de probar esta técnica, debes saber que después del tratamiento tendrás que dejar de asistir al sauna, no dormir boca abajo, evitar maquillarte las cejas y hacer ejercicio por dos semanas.
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