A la hora de cuidar el rostro, hay quienes cumplen religiosamente su rutina de skincare sin importar que se hayan levantado tarde o estén muy cansados al final del día; sin embargo, también hay otro grupo que no considera necesario tener productos diferenciados para cada momento de la jornada y creen que uno solo cumple con todas las recomendaciones. Hoy te explico, de la mano de los expertos, la diferencia entre las cremas de día y de noche y un gran truco para aplicarlas y aprovechar al máximo todos sus beneficios.
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A partir de los 30 años, la piel comienza a experimentar cambios significativos: la epidermis pierde hidratación, la elasticidad disminuye y la dermis recibe menos oxígeno, debilitando su función defensiva. Con el tiempo, lesiones como rasguños, cortes o golpes pueden tardar más en sanar, y es común observar signos como pérdida de firmeza, arrugas y manchas en la piel.
Además, factores como una dieta inadecuada, el consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo pueden contribuir al envejecimiento prematuro de la piel. A eso hay que aumentarle el no realizar una correcta limpieza del rostro y no mantener hidratado el órgano más expuesto del cuerpo.
Cómo cuidar la piel para darle luminosidad al rostro
Como ya te mencioné, la limpieza diaria es clave. Se recomienda emplear productos diseñados especialmente para ser usados en el rostro, como el agua micelar purificante o espuma de limpieza intensiva. Lo ideal es lavar el rostro dos veces al día con agua tibia y secarlo con toques suaves. Además, para mantener la piel limpia y luminosa, es importante exfoliarla dos veces por semana para eliminar células muertas y restos de maquillaje.
Además, hay que preparar la piel para optimizar la absorción de los productos de tu rutina y luego aplica el sérum tanto por la mañana como por la noche y una buena opción son aquellos enriquecidos con antioxidantes como la vitamina C y sus derivados, presentes en la línea Natura Chronos Derma, ideales para estimular la producción de colágeno y proteger las células del daño oxidativo.
Diferencias entre las cremas de día y de noche
Si hablamos de un cuidado antiseñales, el uso de cremas de día y de noche es fundamental para una rutina completa. Las cremas de día protegen la piel de agresores ambientales, como la radiación solar y contaminantes como el dióxido de nitrógeno, que pueden dañar las células cutáneas. Por otro lado, las cremas de noche favorecen la regeneración y reparación de la piel durante el descanso, manteniéndola hidratada y luminosa.
Si quieres un truco que favorezca sus activos, se recomienda aplicarlas con movimientos ascendentes en rostro y cuello, lo que también ayuda a preservar la firmeza de la piel. Eso sí, para para completar la rutina, el uso de protector solar es indispensable.
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