Este lunes 6 de mayo se celebró la MET Gala en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York. El evento benéfico anual— además de recaudar millones de dólares para el Costume Institute del MET—, destaca por su famosa alfombra roja donde artistas, diseñadores y más personalidades del mundo de la moda desfilan sus mejores apuestas de acuerdo a la temática de la noche.
Este año el tema de la exposición del Instituto fue “Bellas durmientes: el despertar de la moda” (Sleeping Beauties: Reawakening Fashion), bajo el cual se expuso 50 piezas de archivo demasiado frágiles para ser exhibidas sobre un maniquí. En lugar, se mostraron dentro de ataúdes de cristal y recobraron vida gracias a la tecnología. Las obras— entre las que destaca un corsé isabelino del siglo XVII— compartieron una misma temática relacionada a la naturaleza, que hizo alusión a lo efímero de la moda. “Es básicamente una oda a la naturaleza”, explicó Andrew Bolton, comisario jefe del Costume Institute y creador de la idea.
Siguiendo esto, el código de vestimenta de la noche fue “El Jardín del Tiempo” (Garden of Time), inspirado en el cuento homónimo de JG Ballard de 1962, el cual tiene como fondo un jardín en un rincón desierto del mundo. Un código que a su vez se dividió en tres subtemas: tierra, mar y cielo.
Como es tradición, el evento estuvo liderado por Anna Wintour, directora de la revista Vogue. Además, los anfitriones de la noche fueron Zendaya, Bad Bunny, Jennifer Lopez y Chris Hemsworth, que estuvieron acompañados de Jonathan Anderson, director creativo de la firma española de lujo Loewe; y Shou Zi Chew, CEO de TikTok.
Sobre la alfombra roja en las históricas escaleras del museo de Nueva York, las celebridades reinterpretaron la belleza de la naturaleza. Las apuestas más literales consistieron de románticos vestidos con motivos botánicos y bordados florales; mientras que los más arriesgados sorprendieron con looks transparentes, con aplicaciones voluminosas y hasta vestidos inteligentes.
Entre flores, relojes y mariposas mecánicas: los mejores looks de la noche
Como era de esperarse, la mayoría de los looks de los invitados fueron de inspiración floral. Sim embargo, la forma de interpretar este elemento de la naturaleza fue muy diversa. Hubo quienes se mantuvieron en la zona de confort con sencillos y alegres vestidos con detalles de aplicaciones florales así como otros que se arriesgaron a pensar en grande, en XL. Como Gigi Hadid que dejó huella con un voluminoso vestido blanco escotado que llamó la atención por la romántica falda con coloridos detalles florales firmado por Thom Browne.
El lado romántico y delicado de estos looks hizo contraste con otros más feroces que apostaron por darle un enfoque melancólico a través de la combinación de texturas, los colores vibrantes y los accesorios para darle mayor dramatismo. Zendaya — como buena co-anfitriona de la noche— llamó la atención por su desafiante look protagonizado por un vestido de la firma Maison Margiela de silueta de sirena, texturas transparentes y brillantes en tonos azules y verdes, además de detalles florales y frutales.
Al ser una temática con subtemas, permitió la posibilidad de crear looks surrealistas con distintos elementos de la naturaleza más allá de las clásicas flores. Por ejemplo, la cantante Tyla llamó la atención por su entallado vestido esculpido en arena de Balmain que complementó con un bolso de reloj de arena. Elle Fanning hizo gala de su característica delicadeza al usar un vestido de Balmain que simulaba agua cristalizada. E incluso la empresaria india Mona Patel —cuyo estilista fue Law Roach, el mismo de Zendaya — se convirtió en una de las estrellas de la noche al integrar la naturaleza y la tecnología a través de un vestido de la diseñadora Iris Van Herpen que destacó por su elaborado diseño: una pieza esculpida sobre su cuerpo que consistió en un corsé en forma de mariposas y una cola ondulada, además de aplicaciones de mariposas en sus brazos que batían sus alas en cámara lenta.
El punto clave de la gala: las piezas vintage
Siendo el tema central de la gala y la exhibición las piezas de archivo, por supuesto, muchos esperaban ver looks protagonizados por exquisitas prendas vintage. Kendall Jenner lució un brillante vestido negro de dos piezas de la colección 1999 de Givenchy. Emily Ratajkowski llevó un vestido brillante semitransparente de la colección otoño-invierno 2001 de Versace. E incluso Zendaya — haciendo honor a su título como una de las mejores vestidas— decidió cambiar su melancólico primer look por uno de archivo. La pieza elegida fue un dramáticamente voluminoso vestido negro de corset de la colección primavera-verano 1996 de John Galliano para Givenchy. Como complemento y a modo de sombrero, llevó un tocado floral que simulaba un bouquet de coloridas rosas, una pieza del 2007 de Alexander McQueen.
Además de las celebridades que se robaron todas las miradas por sus espectaculares looks sobre la alfombra roja, también llamó la atención que esta edición de la Met Gala destacó por la presencia de la comunidad latina. Aunque no es novedad ver invitados de origen hispano desfilando en la alfombra roja, sí lo es dentro de los anfitriones de la noche. Jennifer López y Bad Bunny figuraron entre los protagonistas de la gala, mientras Karol G y Shakira hicieron su debut. Así, los cantantes latinos dejaron en claro que el espectro de invitados de la noche de moda más importante del año es cada vez más amplio.