El domingo 30 de setiembre, en la comunidad campesina San Juan Bautista de Cañaris, se llevó a cabo una consulta popular en la cual participaron 1.896 personas. El proceso determinó que un 95% de los votantes está en contra de que la minera Candente Copper realice labores de exploración en la zona.

Sin embargo, el proceso sería considerado nulo por el Ministerio de Energía y Minas y, en su lugar, se tomará en cuenta una consulta previa realizada el 8 de julio, cuando la población le dio visto bueno al proyecto minero Cañariaco.

“Posteriormente, el presidente de la comunidad [Cristóbal Barrios] hizo una suerte de asamblea popular, procedimiento que no está reconocido por ninguna normativa. Por eso nosotros no podemos considerar como válidad esta reunión”, dijo Manuel Castro Baca, director general de Asuntos Ambientales del ministerio, a Carmen Gallegos, de El Comercio.

Según la autoridad, nunca se entregó una carta con las firmas de los participantes, indispensable para comprobar que son comuneros del distrito de Cañaris, provincia de Ferreñafe, por lo que tomarán en cuenta el primer proceso, con solo 400 participantes.