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Continúan las quejas de los conductores de vehículos particulares y sobre todo taxistas que ingresan a las calles de los alrededores de la Plaza de Armas, en el centro de Lima, por la congestión vehicular que generan las obras de peatonalización de los jirones Ica y Ucayali, entre las avenidas Tacna y Abancay.
Entre sus principales quejas, señalan que pierden tiempo, combustible y no pueden parar ni recoger pasajeros, porque los policías no los dejan.
La mayor congestión esta mañana se produce en parte de los jirones Miró Quesada y Lampa. Este último permanecerá cerrado en un tramo hasta el 27 de este mes, según indicó ayer a elcomercio.pe el arquitecto encargado de la obra, Henry Alemán.
Culminada la construcción del paso peatonal o camellón en el cruce de Ucayali y Lampa, empezará el último en el jirón Caylloma. La segunda etapa de la obra total de peatonalización se entregará el 6 de diciembre.