Los temidos ‘Cuatro fantásticos’ cumplieron su rol ante Paraguay

DAVID HIDALGO JIMÉNEZ @DavidsCreator Redacción Online

De los ‘Cuatro fantásticos’ de Perú ya se habla hasta en Chile, nuestro próximo rival. Si para el hincha de la blanquirroja ahora es un orgullo ver cómo Claudio Pizarro, Paolo Guerrero, Juan Vargas y Jefferson Farfán arremeten como un maremoto cada vez que generan un ataque, está claro que los destrozos ahora los sufren los rivales.

A PIZARRO HAY QUE BLINDARLO Los duros comentarios que recibió Claudio Pizarro en Twitter por fallar un par de goles ante Paraguay son por demás injustos. Al capitán de la selección hay que blindarlo. Es cierto que no tuvo un primer tiempo redondo, falló un tanto cantado después de un buen pase de Cruzado, pero su jerarquía en el campo se puso de manifiesto en cada choque contra la dura defensa paraguaya.

En la segunda parte el ‘Bombardero’ falló uno más debajo del arco, pero su compromiso con los colores se tradujo en un par de jugadas de peligro que fabricó por derecha. La primera terminó en un gol negado al ‘Loco’ Vargas y la segunda concluyó en el 2-0 anotado por Paolo Guerrero. “Los goles ya van a venir”, dijo hoy Pizarro.

‘DEPREDADOR’ NUESTRO Los números de Paolo Guerrero con la selección se traducen en 17 goles, ocho de ellos anotados este 2011, el año en que se consagró como máximo goleador de la Copa América. El ‘Depredador’ se ha convertido en un verdadero demoledor en el área contraria, en un generador de problemas para los rivales y vaya que para eso le sobra calidad.

Eso se vio anoche en el primer gol cuando aguantó la arremetida de un defensa, cubrió la pelota y se sacó con un amague —en medio metro— al arquero Diego Barreto. El reloj mental de Guerrero le permitió acomodarse, levantar la cabeza y definir con calma al costado del primer palo como si su gol estuviera escrito en el guión de una película de ensueño. Con esa misma confianza, paró una pelota en el corazón del área guaraní para luego fusilar sin piedad en el segundo tanto.

LA ‘FOCA’ NOSTRA Es cierto que en el primer tiempo se guardó sus mejores armas que son la potencia y sus ataques en cuchilla que terminan hiriendo a cualquier rival. Pero lo que mostró Jefferson Farfán en el segundo tiempo fue lo más cercano a su mejor nivel en el fútbol europeo. Quitó pelotas apareciendo siempre como una sombra paraguaya, una de ellas significó la jugada del primer gol de Paolo. La ‘Foquita’ se asoció con el ‘Loco’ Vargas en los tiros de esquina y en las acciones posteriores sacó de quicio a los guaraníes. Metió miedo con un par de balones detenidos y chocó cuanto era necesario para ablandar a sus marcadores.

‘LOCO’ DE SELECCIÓN Hasta ahora debe tener atragantados los dos goles que casi grita, pero basta con estar en el estadio para ver avanzar al ‘Loco’ Vargas por el lado izquierdo con la fuerza de una mole. No hay quién le gane en la disputa de un balón. En el cuerpo a cuerpo siempre pierde el otro y triunfa el ‘Loco’. Parece incansable y su pierna izquierda solo sabe sacar balonazos que caen con la fuerza y precisión de un misil inteligente. Juan Vargas, al igual que Pizarro, Guerrero y Farfán, cumple con absoluta disciplina la idea táctica de Markarián. No da pelota por perdida y cuando ataca es un demente destructor, pero cuando defiende se planta como un muro.

Ellos son el bastión de nuestra selección, pero lo suyo no sería tan vistoso sin el trabajo prolijo y conmovedor de Rinaldo Cruzado, la entrega de Adán Balbín, la calidad y elegancia de Alberto Rodríguez, la experiencia de Santiago Acasiete, el aplomo en el arco de Raúl Fernández y el aporte valioso de todos los jugadores peruanos que entran y salen a la cancha para matarse por el objetivo común que se enfoca en la clasificación a Brasil 2014. Lo más importante es que lo que se ve en la cancha da crédito suficiente como para creer y confiar en que el proyecto es posible.