Fernando Vivas

Si quieres paz, aúlla pidiendo que te declaren en emergencia. Esa fue la reacción de Jesús Maldonado, el alcalde de San Juan de Lurigancho, tras la explosión de una granada en la puerta de la discoteca Xander’s. Esa violencia sinuosa, de rebote, que no calcula el daño pero sí el miedo, que no solo buscaba el cupo de un extorsionado, sino enviar una señal a todas sus víctimas en la zona, ese es, pues, el control territorial. Pero, en este caso, no lo ostenta la policía sino la mafia.