Luego de más de una década, Marina Granovskaia dejará de ser la CEO de Chelsea de Inglaterra debido al cambio de propietario. Roman Abramovich le vendió el club a Todd Bohely y este viene realizando modificaciones en el organigrama de la institución ‘Blue’.
De acuerdo a The Telegraph , Granovskaia, “la mujer más poderosa del fútbol”, no continuará en el cuadro londinense y seguirá los pasos de Bruce Buck, actual presidente que dejará su cargo a finales del presente mes.
Bajo su periodo Chelsea tuvo un éxito financiero y logró importantes acuerdos y movimientos en los mercados de fichajes como la renovación de Didier Drogba en 2009, la vuelta de José Mourinho en 2013, el acuerdo con Nike por 1.000 millones de euros en 2017, la venta de Eden Hazard a cambio de 115 millones de euros y las recientes compras de Havertz, Werner y Ziyech, entre otras cosas.
Marina Granovskaia es una auténtica estratega de las finanzas, una dura negociadora y muy cuidadosa con el dinero. Por ejemplo, exigió que la llegada de Gonzalo Higuaín a Chelsea fuera en forma de cesión porque no estaba dispuesta a pagar 50 millones de libras por un jugador de 31 años.
La ruso-canadiense se graduó de la Universidad Estatal de Moscú y comenzó a trabajar para Abramovich en 1997 en Sibneft, una compañía petrolera. Posteriormente se mudó a Inglaterra, tras la venta de Chelsea en 2003.
En 2010 comenzó a actuar como representante de Abramovich y apoyaba en las decisiones de la junta directiva de la entidad, a la que se incorporó en junio de 2013. Al siguiente año pasó a ser CEO o directora general. Además, en 2021 fue nombrada ‘Mejor Directora de Club en el fútbol europeo’ en los premios Golden Boy, lo que destaca su gran labor en la institución.