Juan Aurich finalizó en el último lugar de la tabla del Grupo B del Torneo de Verano con solo 11 puntos, los mismos que consiguió ganando dos partidos, empatando cinco y perdiendo siete. Es el equipo que más goles ha recibido en el campeonato con treinta y un tantos en su contra, sin contar los ocho de Copa sudamericana. Pero, ¿fue realmente culpa de Valencia?
“Recibir trece goles en cuatro días fue un motivo más que suficiente para poner mi cargo a su disposición (a la directiva del club)”, confesó Wilmar Valencia a DT El Comercio. ¿Se le podía pedir más a una defensa titular que su promedio de edad es de 21 años? Yo pienso que no.
Wilmar se encontró con un Aurich desarmado. Alva, dirigente chiclayano, le llama 'recambio generacional'. Pero vamos, ¿realmente se puede hablar de “cantera” en Juan Aurich? Si bien se hace un trabajo de reclutamiento, el equipo chiclayano está muy lejos ser un club “formador”. Aquí lo concreto es que no se realizaron los fichajes adecuados, faltó dinero para armar una plantilla más competitiva y, de esta forma, se dejó a la deriva a un equipo que participaba en Copa Sudamericana.
“El grupo trabajó de la mejor manera siempre. Que no tengan esa experiencia, fortaleza mental y capacidad de reacción a través del carácter o temperamento ante golpes que se dan en un partido es otra cosa. Todo influye en el rendimiento“, explica Wilmar.
A Wilmar se le acabaron los posibles, no tenía cómo construir si no tenía un soporte, un respaldo. Pero admite su culpa. “Con el grupo se puede hacer mucho más (…) No me imaginé que pasara esto. Si bien sufrimos una goleada al comienzo contra Alianza fue un accidente (...) Hay muchos factores, sería justificar todo y yo no estoy para eso“, agregó Valencia.
Wilmar ya se fue y Juan Aurich deberá buscar a otro entrenador que acepte tomar un equipo que, parece, peleará la baja. Uno más para el Ave Fénix norteño que no encuentra identidad alguna en sus jugadores y que su dirigencia parece no tener claro cuál es el problema que los lleva a ser el peor equipo del campeonato local en esta primera parte.
“Definitivamente mi carrera se ve afectada, mi credibilidad, pero soy un tipo que está hecho para la lucha y los que me conocen lo saben. Estoy bien. Seguiré alimentando mis conocimientos y disfrutando de mi familia”, finalizó el ex técnico de Juan Aurich.