Así como en el día a día tenemos una agenda que seguir, en el running es imprescindible contar con un plan. Este plan de entrenamiento va ser la hoja de ruta que nos permita lograr nuestros objetivos y crecer como runners, lejos de las frustraciones y lesiones. Sea cual sea tu nivel, si recién empiezas a correr o buscas bajar tus marcas, el plan de entrenamiento es clave pues asumes un compromiso.
Para crear tu plan de entrenamiento, ten en cuenta estos consejos de Renzo Bartra, entrenador del 42.195 club de fondismo.
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1. Define tus objetivos. Elige las competencias principales en las que participarás. Se recomiendan que sean una o dos por año, las cuales se complementarán con otras carreras secundarias que serán programadas acorde al objetivo principal. Plantéate metas realistas y retadoras. ¿En qué distancia te adaptas mejor? ¿Qué es lo que más disfrutas? No abarques mucho, enfócate en lo que puedes destacar.
2. Rodéate de experiencia. Trabaja con un entrenador o un grupo que se adapte a tus necesidades, donde te sientas cómodo. No solo te beneficiará a nivel físico sino también que aprenderás a trabajar en equipo. En caso no puedas contar con un coach, vale rodearse de gente experimentada de la que puedas aprender y te oriente.
3. Ejecuta el plan a tu medida. Así corras con un grupo de 30 o 40 personas, lo ideal es que tengas un plan de entrenamiento personalizado que te lleve a lograr tu objetivo (tu primera maratón o 10k, por ejemplo). Este plan debe estar adaptado a tus posibilidades físicas, disposición de tiempo y poseer una buena dosis de motivación. Dependiendo del objetivo, se trabajarán las cargas, descargas, resistencia, intensidad, velocidad, capacidad de reacción y ejercicios complementarios para ganar fuerza, coordinación y flexibilidad. No olvides de siempre activar antes y estirar después de tu rutina.
4. La constancia es clave. Se trata de conseguir un balance entre tu vida laboral, familiar y el entrenamiento. La constancia, el compromiso y la motivación son vitales para que cumplas tu plan de entrenamiento sin poner excusas. Es decirse a uno mismo: “Yo me pongo un objetivo y lo logro”. Eso sí, no hay que dejarse llevar por la emoción: corre lo que te corresponde y no más aunque puedas. Recuerda que si por diferentes circunstancias un día no puedes salir a correr, no juntes dos entrenamientos fuertes pues te puedes exponer a una lesión y además no le das el debido descanso a tu cuerpo.
5. Encuéntrale el gusto. El quid del asunto es que te diviertas corriendo. El comienzo es difícil, levantarse en la madrugada no es fácil pero hay que encontrarle el gusto al deporte. Cuando el running se convierta en un hábito, veas mejoras y sientas satisfacción por tus logros, quedarás más cautivado y disfrutarás el hecho de correr más allá de los retos trazados. Además, cuando corres en grupo, se genera un lazo de amistad y camaradería que es uno de los valores más preciados del running. Mejor correr en equipo que solos.
Ahora que ya sabes estás recomendaciones, prepárate para el primer Entel Challenge, realizado por El Comercio y aquí.
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