HORACIO ZIMMERMANN @Horacon Redacción Online
¿Perú debe jugar 4-4-2 o 4-3-3? En todo el proceso Perú tuvo picos altos y bajos en juego. Los más altos se dieron ante Argentina, Venezuela en el segundo tiempo y Chile, también en la segunda etapa. Todos de local, claro. En todos se jugó con el sistema 4-3-3. Ante Ecuador y Colombia, en cambio, la selección jugó 4-4-2. A los norteños se les ganó con algo de sufrimiento. Colombia, por su parte, nos superó con justicia. La pregunta es: ¿por qué no utilizar el esquema con el que se alcanzó picos más altos de juego, más allá de haber ganado o no? Creemos que es debido a la sobrestimada creencia de Markarián por Vargas, Farfán, Pizarro y Guerrero. Creyó tanto en ellos que se hizo rehén de colocarlos siempre. Pero, ¿por qué 4-3-3? Damos otras tres razones: 1) Unir a Claudio y Paolo resta la chance de meter un volante tipo Mariño que nos permita ganar el partido por el centro. Contra Colombia, por ejemplo, Perú niveló las bandas, pero fue inexistente generando por el medio. 2) Poner a dos puntas y dos extremos recarga la labor de los dos volantes interiores, más si no son de salida fina como Retamoso y Ballón. Ayer no teníamos cómo hacer daño desde el centro. 3) Sumar a los cuatro le hace el trabajo sencillo a los rivales. Basta tomar a los volantes interiores para desconectar a Perú.
¿Vargas, Farfán, Pizarro y Guerrero seguirán jugando juntos? Markarián ha creído demasiado en estos cuatro jugadores. Ya lo dijimos, se ha hecho rehén de alinearlos siempre. Ese, creemos, ha sido un error en su proceso. Detrás de la decisión de ponerlos hay un discurso de “jerarquía”. No la compartimos, pero es su apuesta. Y todo indica que ‘morirá’ con ella hasta el final del proceso. Que estos cuatro jugadores hayan sido titulares en estos dos últimos duelos lo explica todo. Markarián no los saca más. Si hubo un momento en el que se suponía un cambio, este fue luego de perder en Asunción. Si luego de esa derrota, en la que el propio comando técnico dudó del compromiso de cada jugador, no se realizaron cambios, creemos que no se harán ahora cuando a Perú solo lo separan dos puntos del repechaje.
¿Los duelos decisivos son ante Uruguay y Venezuela? Sí. Por una sola razón: son los rivales directos. Argentina, Colombia y Ecuador están a un paso del Mundial. Chile también. Queda el cupo del repechaje y la pelea es ante charrúas y venecos, próximos rivales de Perú. El primero en casa y el segundo afuera. Eso sí, tendrán que hacer dos partidos muy buenos. Si se hace uno bueno y otro malo, chau. Ganar los dos partidos supondría para Perú adueñarse del quinto lugar. Sin embargo, aún no habría logrado la clasificación, como dijo Markarián. Ir a Brasil 2014 dependerá de sumar de a tres ante Bolivia en Lima. Son tres partidos claves. No vale pestañear. De lo contrario, adiós a la Copa del Mundo.
¿Es posible ganarle a Venezuela de visita? No todo se resume en un “sí se puede”. Venezuela está hoy por arriba de nosotros y no es por gusto. Además, los números son desfavorables para la selección peruana. De los últimos 21 partidos que jugamos de visita, perdimos 19 y empatamos dos. No ganamos desde el 2004 (victoria 3-1 ante Uruguay en Montevideo). En el proceso de Markarián solo se empató en La Paz. Los números no juegan, es cierto. Solo son parte de la estadística, de la historia. No obstante, no podemos obviar la realidad: Perú es una selección muy débil jugando afuera de Lima. No de hoy, sino de hace años. Que hayamos logrado un solo punto en este proceso lo explica. Entonces, ¿qué hace pensar que ganaremos en Venezuela? Si algo queda claro es que de conseguir tres puntos en Puerto Ordaz, Perú habrá logrado una hazaña. Ya lo hizo Uruguay ayer. Ahora le toca a la selección peruana.
¿Qué pasa con Paolo Guerrero? En la victoria ante Ecuador apareció poco. En la derrota con Colombia, igual. Está lejos de ser el líder que la hinchada proclamaba como el nuevo gran capitán de la bicolor. No solo le pasa en la selección, también en el Corinthians. De hecho, allí no anota hace ocho partidos. Cuando se le consultó qué le pasaba, dijo: “Estoy muy mal en mi preparación física”. Markarián respaldó sus declaraciones: “El problema de Paolo es lo físico”. Dos preguntas: ¿Por qué alinea de titular si tiene un evidente problema físico? ¿Si tiene un problema físico por qué jugó 180 minutos? Paolo tiene un prestigio ganado con el equipo, sí. Eso nadie lo duda. Es un punto a su favor. En esta fecha doble, sin embargo, no lo demostró. Por sus declaraciones, consideramos que para Markarián es titular para no perder jerarquía. Es su apuesta. Lo cierto es que esta vez no le resultó.