Lionel Messi lideró la medida: su selección no hablará más con la prensa argentina debido a lo que ellos consideran “sistemáticos ataques” al plantel. El punto máximo, dice Messi, es la afirmación del periodista Gabriel Anello sobre que Ezequiel Lavezzi no fue incluido en el partido contra Colombia porque antes fumó marihuana y ese consumo podría haberle arrojado positivo en el doping.
El caso no es exclusivo de tierras argentinas. En Perú, para más señas, se han dado tres cosas relacionado a la selección, aquí los detallados.
En 1993 la relación entre la selección que dirigía Vladimir Popovic y la prensa era mala. Los cruces no eran menores y todo estalló cuando se publicó en varios tabloides que había habido excesos en la fiesta de cumpleaños de ‘Mágico’ Gonzales. También cuando la revista Estadio validó una carta en la que se ofendía al directivo Francisco Lombardi y dicha misiva correspondía a un DNI falso. Cansado de lo que ellos consideraban prensa maliciosa, Chemo del Solar, como referente del grupo, lideró un mutis que duró varias semanas. “He resistido con estoicismo insultos cobardes contra mi persona, como el de una revista deportiva -que también mostró- que se escuda en una libreta electoral falsa para decir que me han visto sobornando periodistas”, dijo Lombardi a El Comercio por aquellos años. El resultado del equipo, ya en competencia, fue terrible. En las Eliminatorias para EEUU 94 solo se hizo un punto.
En 2001, en plena Copa América de Cali, la selección del técnico Julio César Uribe también tuvo una pelea muy comentada. El diario El Bocón publicó que varios jugadores habían abandonado la concentración para disfrutar de la noche colombiana, lo que molestó sobremanera a un grupo que lideraban los hermanos Jorge y José Soto y un indignado Juan Jayo Legario. “Es una vergüenza, porque yo tengo familia. Si por mí fuera, no hablo más. Confunden a propósito el salir a dar una vuelta a la esquina con irse a emborrachar”, dijo el aliancista a El Comercio tiempo después. La medida duró 5 días y de a pocos empezaron a retomar el diálogo con los medios, menos, claro está, con el diario que hizo la denuncia. También deslizaron que Uribe estaba involucrado en salidas, aunque luego no lo confirmaron. En aquella copa se pasó la primera ronda, pero en cuartos de final Colombia nos despachó por 3-0.
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En 2004, es decir, solo cuatro años después, el diario Ajá publicó que Miguel Rebosio y Nolberto Solano se habían amanecido en una borrachera. Luego, dicen, habrían ido directo a la concentración con el ok del entrenador Paulo Autuori. La noticia generó fastidio en todo el grupo y solo un día antes de arrancar la Copa que tenía a Perú de local, decidieron no hablar más por casi 8 meses. Autuori se plegó a la medida a diferencia de los casos anteriores. “Acepté hablar pero solo con medios extranjeros que no tergiversan y que nos han tratado con más respeto; nadie quiere pelearse con la prensa, pero fue un ataque injusto e innecesario, además de permanente”, recordó Autuori, cuando retomó contacto. En aquella copa, pese a ser locales, Perú solo pasó la ronda como segundo y fue eliminado en cuarto por la Argentina de Marcelo Bielsa. El marcador fue 0-1.
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