Los ingresos operativos facturados y percibidos de las operadoras de telecomunicaciones cayeron 29,2% en abril, y 17,6% en marzo, informó el Organismo Supervisor de la Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel),
Este resultado fue consecuencia de la menor comercialización de servicios y por la falta de pago de recibos emitidos.
Cabe resaltar que el regulador prohibió el corte del servicio por falta de pago durante estos meses de cuarentena. Esta medida fue revocada y el corte será posible a partir del 3 de junio.
A su vez, y a raíz del estado de emergencia por la pandemia del COVID-19, se ha registrado un incremento significativo de la morosidad en el pago de los servicios.
“Los altos niveles de morosidad afectan los flujos de caja de financiamiento o de inversión, con la consecuente postergación de inversiones, lo que impactará, en el mediano o largo plazo, sobre el normal desarrollo de la industria”, anotó el Osiptel.
A pesar de la alta morosidad, solo se ha solicitado fraccionamiento alrededor del 2,2% de todo el monto adeudado por los servicios.
El fraccionamiento es una facilidad de pago que las empresas operadoras han puesto a disposición de los usuarios mediante diversos canales de atención y que aún sigue vigente, anotó el organismo.