Las principales bolsas europeas han cerrado este viernes con resultados dispares, aunque sin caídas significativas, tras el ataque contra la provincia iraní de Isfahán, atribuido a Israel.
En un primer momento, las noticias sobre el ataque provocaron una subida sensible del precio del petróleo y de activos refugio como el oro o la renta fija, y un descenso acusado de las bolsas asiáticas que se prolongó a la apertura de los parqués europeos.
Sin embargo, cuando se conoció el escaso impacto del ataque y la templada reacción de Irán, el nerviosismo del mercado se fue disipando.
Finalmente, Fráncfort ha bajado un 0,56 %; Madrid, un 0,33 %; y París, un mínimo 0,01 %. Por el contrario, Londres ha ganado un 0,24 % y Milán, un 0,12 %.
El Euro Stoxx 50, que agrupa a las mayores empresas europeas, ha retrocedido un 0,37 %.
En Asia, sin embargo, los descensos han sido generalizados y más intensos. Tokio se dejó un 2,66 %; Hong Kong, un 0,99 %; Shanghái, un 0,29 %; y Seúl, un 1,63 %.
Wall Street ha abierto con dudas. A la hora de cierre de los mercados europeos, el Dow Jones subía un 0,4 %, pero el S&P 500 perdía un 0,4 % y el tecnológico Nasdaq, un 1,4 %.
En el mercado petrolero, los precios repuntaron con fuerza con las primeras noticias del ataque y luego fueron cediendo hasta entrar en una fase de volatilidad.
El Brent, el crudo de referencia en Europa, llegó a alcanzar los 90,7 dólares por barril, aunque ahora ronda los 87,2. Entre medias, el precio bajó hasta los 86,2 dólares por barril.
El oro, uno de los activos refugio en tiempos de incertidumbre, sube un 0,5 %, hasta 2.392 dólares por onza, pero en algunos momentos ha rozado los 2.418 dólares, cerca de su máximo de 2.431,5 dólares registrado el viernes pasado.
En el mercado de deuda, los bonos de las economías más sólidas repuntaron tras el ataque, lo que se tradujo en un descenso de las rentabilidades, tendencia que se ha corregido.
El rendimiento del bono alemán, considerado el más seguro, sube ligeramente hasta el 2,496 %.
En el mercado de divisas, el euro se revaloriza respecto al dolar estadounidense y se cambia a 1,0665 unidades.
El bitcóin, la criptodivisa más utilizada, sube un 1,6 %, hasta 64.580 dólares, a pocas horas del ‘halving’, un evento que se produce cada cuatro años y que reducirá a la mitad la emisión de nuevas monedas.
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