Pese a que el viernes se publicó en El Peruano el decreto que posterga por cinco años el inicio del apagón analógico para la televisión digital en el país y a que el dispositivo llevaba la firma del ministro de Transportes y Comunicaciones, José Gallardo Ku, este alto funcionario actuó en conferencia de prensa ayer como si no tuviera conocimiento de la decisión.
La postergación del inicio de la transmisión digital en los canales de televisión ha elevado el malestar de los principales canales de televisión, según trascendió, pues la mayoría se había preparado e invertido para estar listos este año y ahora corren el riesgo de no ver rentabilizada su inversión.
En Lima, primer territorio programado para iniciar el apagón digital, el plazo para que los canales de televisión cambiaran sus equipos analógicos por digitales y arrancaran las transmisiones digitales estaba programado para finales del primer semestre de este año.
Cumplido el plazo, remitimos cuestionarios al MTC sobre los avances en la migración, pero decidieron guardar silencio sobre el particular hasta este viernes pasado, cuando publicaron el Decreto Supremo N°. 020-2014-MTC, que posterga el plazo por cinco años.
La justificación que reza la norma es “porque el mercado no está listo”, pero no se detalla si el problema es la preparación de los ciudadanos (quienes deben comprar decodificadores o nuevos televisores a precios acesibles) o si existen emisoras incapaces de asumir los costos de migración de sus equipos de analógicos a digitales.
En una conferencia de prensa en la mañana de ayer, la prensa le preguntó al titular de la cartera, sobre las razones que habían motivado la postergación del plazo y esperaban una aclaración sobre el particular, pero solo se consiguió la promesa de que sea el vice ministro quien dé las explicaciones del caso pronto. Recién en la noche, el viceministro de Comunicaciones, Raúl Pérez-Reyes, envió un correo a El Comercio dando detalles sobre la decisión.
HACIA ATRÁS
La noticia ha sido recibida con tranquilidad entre quienes no habían renovado televisor ni comprado un decodificador digital para poder recibir las nuevas señales que emitirán los canales. Pero, en el caso de las emisoras de TV que hicieron grandes inversiones para estar listas a tiempo, existe un gran fastidio.
La incomodidad se acrecentó ayer cuando el titular de la cartera no supo dar detalles o justificaciones para la medida que él mismo había firmado el viernes. Pero difícilmente desaparecerán cuando lleguen las explicaciones, porque la programación de televisión empieza a competir con el consumo de videos en Internet y la publicidad interactiva posible en la TV digital haría retornar las inversiones realizadas para estar listos.
Ahora hay una pausa en medio de una carrera de alta velocidad, lo cual desconcierta, por decir lo menos, a una industria en pleno proceso de mutación. Esperamos que esta pausa sea una forma de hacer las cosas bien y no simplemente un avanzar para atrás.