«Sí, acepto», dos palabras que son pronunciadas, año a año, por cerca de 100.000 parejas a nivel nacional. El matrimonio marcará el inicio de una nueva etapa, que no sólo sellará el compromiso de dos personas, sino que influirá en el patrimonio de los cónyuges.Follow @EconomiaECpe
Cada vez que dos personas se casan se aplica sobre ellos un régimen económico por defecto: hablamos de la sociedad de gananciales. “¿Qué implica este régimen? Implica que haya bienes que sean propios, pero además que haya un patrimonio común”, señala Héctor Campos García, abogado civil de Linares Abogados.
Las parejas pueden tener bienes propios aún en un Régimen de Sociedad de Gananciales. (Fuente: Código Civil) pic.twitter.com/yu16qn4CPa— Miriam Romainville (@miriamroiz) 3 de enero de 2017
Campos indica que para evitar que las deudas del cónyuge afecten el patrimonio de la pareja, o que existan problemas a la hora de determinar a quien pertenece cada bien, es que se recomienda optar por la separación de bienes, conocido también como separación de patrimonios.
“Si los cónyuges, una vez casados, deciden que no quieren tener bienes comunes, pues ellos están en la total libertad de establecer un acuerdo privado que diga que cada uno de los bienes que se adquieran son propios”, explica.
El tramite para optar por este régimen se puede realizar antes o después del matrimonio. En el caso que sea antes, al momento de abrir el pliego matrimonial, se debe brindar una declaración jurada de los bienes de cada uno de los cónyuges, que debe tener la firma de un notario, y hacer expreso su deseo de casarse bajo este régimen.
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Si ya se concreto el matrimonio, será necesario que los cónyuges vayan a un notario para que se haga una liquidación de bienes. Ya que se presume que todo lo que se adquirió en matrimonio pertenece a ambos cónyuges. Lo complicado de esta etapa será probar que el bien pertenece sólo a uno de los miembros.
El abogado manifiesta que para probar eso, el cónyuge puede presentar contratos de financiamiento, las negociaciones de ese contrato, transferencias, facturas, boletas, el financiamiento de los bancos. En resumen, documentos que prueben que no ha habido recursos del otro cónyuge.
“Luego que yo obtengo esa minuta eso se inscribe en Registro Públicos”, agrega Campos. En esta etapa, la Sunarp requerirá una serie de documentos, como un formato de solicitud de inscripción, la partida de matrimonio, o la escritura pública que contenga el acto inscribible.
Cabe destacar que el régimen de sociedad de gananciales se aplicará no sólo a matrimonios, sino también a uniones de hecho, basta que hayan transcurriendo dos años para que se aplique este régimen.