Fitch Ratings rebajó otra vez las calificación de Volcan Compañía Minera y subsidiarias (Volcan) desde B- a CCC- en incumplimiento de emisor (IDR) en moneda local y extranjera a largo plazo, luego que las mismas pasaran, en octubre pasado, de B+ a B-; así como de sus notas sénior no garantizadas con vencimiento en 2026, desde B-/RR4 a CCC -/RR4.
Sin embargo, la agencia calificadora decidió eliminar la observación negativa asignada previamente a las calificaciones de la empresa.
Según Fitch Ratings, la evaluación refleja la probabilidad de un proceso similar al de un “default” porque Volcan no ha podido abordar razonablemente sus necesidades de refinanciamiento y problemas de liquidez desde que se le colocó una observación negativa a sus calificaciones antes de su primera entrega (pago de deuda), programada para finales de abril de este 2024.
Volcan registra próximos vencimientos de deuda en 2024, 2025 y 2026 con una posición de caja débil y opciones de financiamiento o refinanciamiento cada vez más reducidos.
“Las ventas de activos o los pagos anticipados considerados anteriormente no se concretaron o no escalaron de acuerdo con las expectativas previas de Fitch”, enfatizó la agencia.
Los vencimientos de deuda se inician en el segundo trimestre de este 2024 con amortizaciones trimestrales que suman US$ 105 millones para este año y sube a US$ 135 millones en 2025 para llegar a US$160 millones en 2026, cuando vence el préstamo sindicado bancario de US$ 400 millones. Al 30 de setiembre del 2023, Volcan contaba con US$55 millones en efectivo, mientras que la línea de crédito revolvente de US$ 50 millones no fue renovada.
De acuerdo con Fitch, la minera tiene opciones limitadas de refinanciamiento tras no haber ejecutado sus planes de venta de activos dentro del plazo esperado. A pesar de haber firmado Volcan acuerdos de prepago de venta de concentrados por US$ 25 millones y con la posibilidad de negociar más acuerdos, la calificadora sostiene que dicho proceso no ha cumplido con las expectativas de montos y plazos anteriores.
Fitch también expresó su preocupación por el tema de la gobernanza en Volcan, ya que la disputa de los accionistas ha acelerado su situación actual, trasladándose a una “incapacidad para abordar sus necesidades de refinanciamiento”.
El accionista mayoritario de Volcan es Glencore, que controla el 55% de las acciones con derecho a voto, mientras que los minoritarios son las administradoras de fondos Pensiones del Perú y las familias De Romaña y Letts.